Esto es lo que transmite Impacto Teatro en su nueva puesta en escena de la versión de Jean Genet: Las criadas. Estrenada el pasado domingo 23 de abril, en la Sala AZarte en Madrid, bajo la dirección de Inés Sanjuán.
Las actrices, Inés Sánjuán y Sara Sierra, elegantes en todo momento en un clima de pasiones escondidas, de acusaciones insultos amor y sexo. Cuanto miedo y sometimiento. Dan ganas de acunaros y llevaros a la cárcel al mismo tiempo. Todo este lenguaje, toda esta ceremonia de poderosas y oprimidas que la dirección adorna con un atrezzo maravilloso y valiente, cumple para asistir a un bellísimo espectáculo, de tensión, agresividad, y un amor tan denso que se puede tocar.
Una dirección cíclica y carismática que engancha al espectador desde el minuto uno con aroma de perfume, de revolución legítima y terrible consecuencia. Esta adaptación maravillosa y realmente carismática, consigue sumergir al espectador en un día a día dominado por un doble juego. Por un lado, vemos toda una perspectiva realista sobre la sociedad actual, la lucha de clases sociales, el papel del poder y la corrupción. Y por el otro, vemos como toda esa trama se va desmontando al ser envenenada por una cargada atmósfera poética y ensoñadora, donde los personajes se ven diluidos entre la realidad, la falta de justicia, los sueños y la confusión. Ahogándose en un mundo de esperpentos, grotescos y enmascarados espejos de dobles e incluso triples realidades.
Una puesta en escena donde la imagen y los diálogos son igual de importantes que los mismos personajes, tanto que consigue del espectador una concentración donde hace que casi ni pestañee.
Una versión redonda y maravillosa. Sin duda, un plan perfecto para una inolvidable tarde de domingo que invita a la reflexión y al debate inmediato, como pudo observarse al finalizar la representación desde el mismo patio de butacas.