La forma de vida actual, con su ritmo acelerado, sus prisas y su no parar ni un momento hace que sean muchos los que se ven en la obligación de robarle horas al sueño, algo que a la larga acabará pasando factura. Pero, tal y como indican desde CARDIO VALLÈS, “este ritmo trepidante impuesto por la sociedad ha propiciado el aumento de personas que sufren trastornos del sueño”.
Se estima que cualquier persona normal dedicará un tercio de su vida a dormir, es decir, una persona de 60 años, habrá dormido a lo largo de su vida, nada más y nada menos que 20 años, lo que puede que a algunos le parezca un auténtico desperdicio de tiempo. Sin embargo, el sueño es necesario para el desarrollo normal de la vida de cualquier persona, y todo aquel individuo que duerma mal o no sea capaz de conciliar el sueño, verá, a no muy corto plazo, como su salud y su calidad de vida empeoran.
Pero, ¿de qué se habla exactamente cuando se hace referencia a los trastornos del sueño?
Desde CARDIO VALLÈS comentan que “entre los trastornos de sueño más comunes se encuentran el insomnio, la narcolepsia, el ronquido y apneas del sueño, las parasomnias, el síndrome de las piernas inquietas, los terrores nocturnos, las pesadillas y el sonambulismo. Por suerte, casi todos ellos muy fáciles de diagnosticar y tratar, con lo que se consigue una notable mejoría en la calidad de vida del paciente”.
Pero cada uno de estos trastornos tiene sus peculiaridades, así mientras que el insomnio se define como la dificultad para dormir o mantenerse dormido, la narcolepsia provoca somnolencia diurna extrema. Por su parte las parasomnias son trastornos de la conducta que aparecen mientras se duerme dando lugar al sonambulismo, los terrores nocturnos y las pesadillas.
Las apneas del sueño se materializan en forma de pausas respiratorias repetitivas al dormir, mientras que el síndrome de las piernas inquietas es un trastorno neurológico que consiste en una sensación de inquietud que suele aparecer en las extremidades inferiores durante el reposo.
A pesar de lo que la mayoría pueda creer, los trastornos del sueño se pueden presentar en cualquier momento de la vida, teniendo en cada caso sus peculiaridades.
En cualquier caso, dormir bien, es decir, tener un sueño reparador que nos permita afrontar el día con energía es lo normal, y en caso de que no sea así, lo conveniente es consultar con los especialistas.