A lo largo de la vida, el que más y el que menos habrá sufrido alguna vez las comúnmente conocidas como agujetas tras realizar actividad física o cualquier otro esfuerzo fuera de lo habitual. Sin embargo, pocos saben que el nombre correcto que se le debería atribuir a las famosas agujetas es Delayed Onset Muscle Soreness (DOMS), que en español se podría traducir como dolor muscular de aparición tardía y, como su propio nombre indica, hace referencia al dolor muscular que aparece tras la realización de una actividad física de cierta intensidad a la que, normalmente, una persona no está acostumbrada. Su aparición se produce entre 12 y 24 horas después de la realización de la actividad, de ahí que se denomine aparición tardía.
Sin embargo, y tal y como indican desde Fitness & Coach, “pese a que las agujetas forman parte del día a día de muchas personas, son muchas las dudas y mitos que las rodean, desde su origen hasta la forma de prevenirlas”.
Y es que, hasta no hace mucho se creía que las DOMS se producían debido a la cristalización del lactato en los músculos, algo que ya se ha descartado del todo, apuntando ahora las teorías hacia un daño muscular que provoca microtraumas en las fibras musculares, dando lugar a procesos inflamatorios y acumulación de metabolitos.
“Cabe resaltar que se ha descubierto que las agujetas se originan en la fase excéntrica del movimiento, es decir, al bajar escaleras, en el descenso de sentadillas, dominadas, etc. Tienen además una componente neuronal, motivo por el que en muchas ocasiones se sienten agujetas en músculos que no se han entrenado”.
Uno de los grandes mitos que rodean a las DOMS es que son la señal de que se ha entrenado correctamente, algo que no es para nada correcto. Lo normal es que las agujetas aparezcan con el exceso de ejercicio. Sin embargo, es posible reducir su aparición, intensidad o duración siguiendo las sencillas pautas que se muestran a continuación:
- Planificar y ajustar el entreno a la capacidad de cada persona.
- Consumir proteínas de calidad tras el entrenamiento.
- Recurrir a masajes o inhibición miofascial con foam roller puede ayudar a su reducción.
Además de los anteriores, existe evidencia de que el calor, ya sea en forma de sauna o baños reduce su efecto, asimismo el consumo adecuado de cafeína también puede contribuir a mantener las DOMS alejadas.
Y sí, lo de que beber agua con azúcar evita la aparición de agujetas, es un mito.