No son las novedades lo que más interesa de las ferias de libros, sino el encuentro con libros de largo aliento, con escritos originales que transforman la comprensión de los temas y que, por alguna extraña razón, no se habían leído antes.
Es el caso del ensayo del psicoanalista junguiano Áxel Capriles M., Erotismo, vanidad, codicia y poder. Las pasiones en la vida contemporánea, publicado en la colección Noema, por editorial Turner, que he encontrado en la Feria del Libro de Madrid que tiene lugar en el parque El Retiro hasta el 6 de junio.
Hablar de emociones y pasiones es hablar de la vida misma y siglos de discusión sobre su naturaleza y significado. De las emociones irracionales se pasa a las inteligentes y de las reacciones desorganizadoras a los mecanismos de adaptación.
El ensayo de Áxel Capriles da un giro que lo hace enteramente original. Casi todas las interpretaciones de las emociones parten de sus orígenes orgánicos y se entienden en función de los objetos a los que van dirigidas, en términos de los procesos de adaptación del mundo exterior, no en referencia al mundo interior, al universo de significados subjetivos que constituyen y marcan la personalidad de cada quien, sus mudanzas y transformaciones. Un simple cambio de mirada permite entender millares de contradicciones y aparentes conflictos entre las distintas formas de entender los afectos humanos. Cada pasión tiene un patrón en el que cada una de sus partes es símbolo o expresión de los movimientos del alma, es decir, del desarrollo psíquico.
Erotismo, vanidad, codicia y poder. Las pasiones en la vida contemporánea, dedica un primer capítulo a las emociones en general, y cuatro a pasiones específicas: el erotismo, la fama, la codicia y el poder. Cada ensayo tiene su riqueza.
En tiempos de politización del sexo, en tránsito de convertirse en asunto de políticas públicas, Una nota sobre exotismo y erotismo devuelve el erotismo a la vida íntima y lo descubre como vehículo de refinación y cultura.
En tiempos de redes sociales e influencers, Biografía del selfi o por qué nos queremos tanto, es un ingenioso ensayo para analizar el narcisismo contemporáneo.
En el capítulo sobre Codicia y voracidad, Capriles destaca la importancia de diferenciar emociones como el trabajo más difícil en el desarrollo de las personas. Y a pesar de que el afán de poseer nada tiene que ver con el amor, ni el dinero con la autoestima o la felicidad, muchos confunden el lenguaje de una emoción con otra.
El último ensayo del libro, Poder e inferioridad psicopática, tiene particular relevancia para los tiempos contemporáneos. Examina el auge de las personalidades psicopáticas que tienden a alcanzar posiciones de influencia y poder, en los gobiernos y las empresas, y yo diría que hasta en las organizaciones benéficas, y alerta sobre el fenómeno cada vez más frecuente del triunfo del psicópata adaptado. Son personalidades malsanas y tóxicas que, sin embargo, consiguen el favor y hasta el amor de las masas.
Capriles mueve al lector a analizar no sólo por qué las personalidades narcisistas y psicopáticas necesitan ser adoradas e idealizadas, como tantas que vemos triunfante en la política, sino por qué todos tenemos una necesidad infinita de idealizar a otros. El libro llama la atención sobre las consecuencias políticas de dejarnos seducir por el encanto del psicópata, nos obliga a revisar su vínculo íntimo con nuestras fisuras, nuestras propias lagunas psicopáticas. Tiempo para que la psicología salga a la calle.
