La optimización de los procesos logísticos es, sin lugar a duda, algo a lo que cualquier empresa, sea del ámbito que sea, debe prestar especial atención dado que repercute muy directamente en los costes.
La parte de la logística que hace referencia tanto a la organización de los flujos de materiales como a la información que se produce dentro de la empresa, recibe el nombre de logística interna o intralogística, mientras que la logística externa se ocupa del transporte de los productos hasta su destino final.
Dentro de la logística interna se pueden distinguir diferentes áreas, entre las que se encuentran:
- Transporte interno de materiales, abarcando el realizado no solo en el interior de las instalaciones, sino también el que debe ser realizado entre las distintas plantas productivas que pueda tener una empresa.
- Gestión de stocks y de flujos de información, se ocupa de reflejar cada movimiento de las mercancías, así como de controlar permanentemente el stock existente y anticiparse a la necesidad de materiales.
- Gestión de almacén, abarca todos los procesos que tienen lugar en el interior de las instalaciones de almacenaje, como es el caso de la preparación de pedidos, o la recepción mercancías.
Y, ahora que ya se conocen las áreas sobre las que es posible actuar, ¿cómo se puede optimizar la logística interna de una empresa?
En primer lugar, y para que todo fluya correctamente, es necesario planificar concienzudamente las operaciones de producción y almacenaje.
En segundo lugar, debe tenerse en cuenta que los desplazamientos internos de mercancías representan un elevado porcentaje de los costes de la intralogística, por lo que se debe invertir en facilitar este tipo de transporte de mercancías, para, de este modo, reducir estos costes. No obstante, y pese a que muchos pudieran creer que esto supone un gran desembolso, lo cierto es que hoy es posible encontrar en el mercado carretillas, traspaletas o, incluso apiladores de ocasión que presten un servicio excepcional sin tener que realizar una gran inversión.
Asimismo, la implantación de un software específico de gestión de almacenes y una mayor conectividad, facilitarán enormemente el trabajo, a la par que ahorrarán tiempo.
Así que, ya sabes, planificación, automatización y mejora de la conectividad son las claves para optimizar la logística interna de tu empresa.
