Cuando el pequeño Jan, de siete años, se enteró de que apenas quedan 411 ballenas francas del Atlántico Norte, se sintió horrorizado. ¿Cómo puede estar a punto de desaparecer una especie de cetáceo tan increíble, que puede alcanzar los 16 metros de longitud?
Jan sintió que debía hacer algo, pero no sabía qué. Así que no dejó de darle vueltas al asunto hasta tener una idea: con ayuda de su familia, creó #RightWhale, una iniciativa solidaria que consiste en la venta de una botella reutilizable cuyos beneficios se destinan a proteger a las ballenas francas.
Desde Málaga (España), donde reside la familia de Jan, la campaña se esta extendiendo por todo el mundo por Internet y cuenta con cientos de apoyos.
Menos plásticos y más ballenas en los océanos
Las ballenas francas llegaron a habitar todo el Atlántico Norte, pero casi fueron exterminadas por los balleneros debido a su gran tamaño y facilidad para cazarlas (por eso en inglés se conocen como “right whales”, las ballenas “adecuadas para cazar”). Aunque su captura está prohibida desde 1935, este cetáceo se sigue enfrentando a tres peligros: los accidentes con barcos, las redes de pesca y la contaminación de los océanos. Esto las ha convertido en un de las especies más amenazadas del planeta, con solo 411 ejemplares.
La botella #RightWhale ideada por Jan persigue un doble objetivo: por un lado, reducir el uso de botellas de plástico para evitar que sigan contaminando los océanos; por el otro, recaudar fondos para impulsar la protección de las ballenas francas mediante diversas medidas, como la creación de santuarios o el desarrollo de artes de pesca menos peligrosas.
Esta botella cuenta con un práctico tapón antifugas que la hace ideal para llevar a cualquier sitio y usar con una sola mano al hacer deporte o conducir (encaja con la mayoría de sujetavasos de coches y bicicletas). Su pared de doble aislamiento permite mantener la temperatura hasta 12 horas. Al estar fabricada con acero inoxidable y boquilla de plástico sin BPA ni ftalatos, se puede reutilizar de manera indefinida, evitando el uso de botellas de plástico.
La botella #RightWhale está disponible en varios colores y tamaños, que se pueden personalizar con el nombre del cliente o el logotipo de la empresa. Se entrega con un cuidado embalaje reutilizable que la hace ideal como regalo.
También hay una versión más pequeña y con pajita dirigida a niños y bebés.
De un mercadillo a las mayores tiendas online
Jan empezó a vender las botellas #RightWhale en un mercadillo navideño en 2018, con una estupenda acogida. Esto le animó a impulsar una campaña más ambiciosa que ha llegado a todo el mundo gracias a las redes sociales.
Actualmente, las botellas #RightWale se venden en la tienda online para España, en Rusia a través del minorista online Wildberries y pronto estarán disponibles en Amazon para el resto de Europa.
Por cada venta, se realiza un donativo al Anderson Cabot Center for Ocean Life de Boston (Estados Unidos), que lidera el mayor proyecto mundial para la investigación y preservación de las ballenas francas del Atlántico Norte.
«Cuando te enteras de que una especie tan majestuosa como las ballenas francas está a punto de desaparecer, es fácil sentirte abrumado. Sobre todo si solo eres un niño de siete años como yo”, explica Jan. “Por eso decidí empezar por algo sencillo, como diseñar y vender una botella reutilizable. Un gesto que parece pequeño, pero tiene el potencial de cambiar muchas cosas».
Cada botella reutilizable #RightWale puede evitar el uso de 1460 botellas de plástico al año, muchas de las cuales acaban contaminando nuestros océanos y dañando a las ballenas y otras especies. A la vez, permite recaudar fondos para promover la investigación y protección de esta especie. Por eso cada persona que compra una botella #RightWhale contribuye a dar una nueva oportunidad a las ballenas, a los océanos y a nosotros como seres humanos”.