Cada vez son más las familias, grupos de amigos e incluso viajeros individuales que prefieren encontrar en destino un apartamento turístico en el que poder hospedarse como si de una casa propia se tratara.
Conseguir uno no siempre es sencillo si no se sabe dónde buscar, de ahí que haya una serie de buscadores y comparadores que ofrecen la mayoría de oferta disponible según la zona.
Aún así, para los que no lo tienen claro, ¿cuáles son los pros y contra de esta elección?
Tal como hablan quienes han podido comprobarlo personalmente, entre los pros destacan la privacidad que ofrece, siendo una elección perfecta para familias o grupos que buscan un espacio tranquilo y propio para sus rutinas.
Además, siempre destacan que son más amplios que cualquier habitación de hotel, incluyendo sala, cocina y terraza en algunos casos.
“Eso permite una libertad a la hora de planificar, por ejemplo, los desayunos sin los horarios estrictos, incluso cenas en los mejores horarios para los más pequeños. La libertad de abrir la nevera y poder picar algo entre horas o incluso de preparar en casa snacks para llevar. En el caso de personas con peculiaridades como alergias o intolerancias, es más sencillo controlar fuera de casa la dieta” explican desde los Apartamentos Flota de Indias.
Además, en estadías largas, suelen contar también con lavadora, lo que facilita los cambios de ropa.
Pero, ¿tiene también contras?
A priori puede parecer que el coste inicial es más alto que cualquier habitación pero, cuanto más grande sea el grupo y más se utilicen sus servicios.
Si se viaja solo, sí es cierto que hace menos probable el conocer gente en espacios comunes, pero sólo si parte del plan que tenga.
Otro de los contras suele ser el tema de la limpieza, aunque cada vez hay más apartamentos que tienen servicio de limpieza como si de un hotel se tratara.
Sin duda, es una alternativa que tiene sus ventajas e inconvenientes, pero que permite elegir a cada viajero la forma de planificar sus viajes y de buscar, además, zonas específicas en la ciudad en la que puede que no haya tanta oferta de alojamiento.