Australia está pasando por una de las peores plagas de ratones que ha sufrido en las últimas décadas. Las autoridades se encuentran preocupadas debido a que no encuentran solución a tan dantesco problema.
Los más afectados están siendo los agricultores, quienes en los últimos meses han sufrido inundaciones, una dura temporada de sequía que acabó con casi todas las plantaciones y, por si fuera poco, ahora se ven minados de ratones.
Todo lo que hay que saber sobre la última plaga de roedores de Australia
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Una plaga de millones de ratones
Se inició como una situación hasta cierto punto controlable, pero después comenzaron a aparecer ratones por todos lados. En las alacenas, en los techos, incluso en las camas de las personas.
A pesar de que se ha intentado controlar la plaga con los métodos tradicionales, no se ha logrado, ya que se reproducen con mayor rapidez de la que granjeros y miembros de control animal pueden colocar cebos envenenados y trampas.
La presencia de estos dañinos animales ha traído como consecuencia algunas situaciones que podrían considerarse de grave peligro.
Daños a los cultivos
Las cosechas son arrasadas por estos roedores y toda aquella que se encuentra almacenada también es presa de estos animales. Un granjero de la región de Nueva Gales del Sur expresó que sus pérdidas iniciales van por más de 40.000 dólares.
Allí se contabilizan los tractores y sus vehículos, ya que también se han visto afectados, puesto que los ratones mastican los cables, dañando los componentes de estos vehículos.
Como se sabe, estos animales transmiten una enfermedad llamada leptospirosis y si llegan a orinar en algún cultivo que no haya sido cosechado, y que posteriormente es recogido y enviado a los mercados, el alimento puede afectarse, causando graves daños a la salud de las personas que los consumen.
Desequilibrio en el ecosistema
El medio ambiente está perfectamente equilibrado con respecto a la relación entre depredadores y víctimas. El aumento de la presencia de ratones generará también un aumento en la cantidad de serpientes.
Como se sabe, en Australia se encuentran 8 de las 10 serpientes más venenosas del mundo y los ratones son su manjar favorito. Ya algunas personas han denunciado la aparición de la culebra marrón oriental, que es considerada la segunda más venenosa del planeta.
Lo que quiere decir que a medida que sigan apareciendo ratones en los centros poblados, seguirán apareciendo también los réptiles venenosos que puedan comenzar a invadir no solo campos de cultivos, sino también hospitales, hogares y escuelas.
Cansancio psicológico
Muchas personas sienten fobia hacia estos roedores y, aún los que no la tienen, han comenzado a desarrollarla debido a que allí donde dirijan la vista, ven a un gran número de ratas y ratones.
A los centros hospitalarios han llegado muchas personas con crisis de pánico, y han tenido que ser incluso medicados debido a la espantosa situación en que se encuentran.
A pesar de que algunas comunidades como la de Nueva Gales del Sur y Gilgandra, han tratado de contratar especialistas para el control de plagas, el trabajo de estos ha sido insuficiente.
Capacidad de reproducción
En 3 semanas los ratones pueden llegar a tener una camada de 10 crías. Es decir, que una hembra está en capacidad de dar hasta 500 ratones en una sola temporada, por lo que llegará un momento en que la cantidad actual de roedores se triplicará.
Es tan grave la situación, que los roedores se sienten con tal libertad que marchan en grupos de miles por las calles de Australia y, aunque las personas cierran puertas y ventanas, siempre encuentran una manera de entrar a las casas.
Sin duda alguna, esto puede convertirse en un problema global que si no es atendido a tiempo, conseguirá causar graves daños no solo desde el punto de vista social, sino también económico.
En tanto, el gobierno anunció un paquete de 32 millones de euros en tratamiento de granos y veneno. Así como asistencia a todas aquellas personas que se han visto en la obligación de abandonar sus residencias por la presencia de gran cantidad de ratones.
Posibles razones que generaron la aparición de la plaga
Según expresó el Ministro de Agricultura de Australia, Adam Marshall, el ratón doméstico se ha adaptado perfectamente a las condiciones, no solo ambientales sino también sociales.
Este país vivió una larga temporada de inundaciones y, posteriormente, períodos de sequías que redujeron las cosechas y, por ende, la comida. Este animal, entonces, restringe el dar a luz durante ese tiempo, ya que no tiene como alimentar a sus crías.
Cuando la producción de cultivos aumenta y las condiciones climáticas son favorables, comienza lo que podría llamarse una mega reproducción de roedores, que es lo que se estima que está sucediendo.
Otro hecho de importancia, es que, al parecer, estos animales se han hecho resistentes a los diversos tipos de veneno que se utilizan tradicionalmente para eliminarlos, por lo que será necesario aplicar un raticida de mayor potencia.
Pero para que esto pueda realizarse, dicho raticida debe ser aprobado, previamente, por el Ministerio de Agricultura, y mientras esto sucede, los ratones siguen reproduciéndose.
Otro hecho que puede contribuir a la aparición de esta plaga, es que se ha generado un círculo vicioso entre productores agropecuarios y ratones. Esto sucede de la siguiente manera:
Los roedores llenan de heces las reservas de grano, el forraje para alimentar el ganado y los productos de consumo humano, lo que hace imposibilita su consumo.
Por esta razón deben ser tirados y, en muchos casos, incinerados, pero igualmente quedan restos que siguen siendo consumidos por los ratones, haciéndolos cada vez más fuertes y con mayor capacidad de reproducción.
Futuro incierto
Es tal la cantidad de ratones en Australia, que las regiones están siendo invadidas de forma paulatina y se cree que en un par de semanas podrían haber penetrado en Sydney, con todos los problemas que estos generan.
No solo la leptospirosis, sino también el aumento en la presencia de serpientes venenosas que pueden incrementar hasta en un 60% la cantidad de personas mordidas.
En tanto, se piensa que el futuro es incierto y parece que los roedores cada día ganan más terreno, ante una autoridad que no tiene un plan de acción para controlarlos.