Trenes Hyperloop, volar en aviones supersónicos, viajar en autopistas «inteligentes» o yendo de punto A a B en drones autónomos… cuando los consumidores escuchan cómo será un viaje en el futuro, se sienten esperanzados, aunque algo inseguros. Esta conclusión se desprende de una investigación sobre el sentimiento del consumidor sobre el futuro de las tecnologías de los viajes realizada por Travelzoo® (NASDAQ: TZOO) – publicación global de ofertas y experiencias exclusivas para sus socios, en colaboración con ITB Berlin.
El Director General de Travelzoo para el Reino Unido, Joel Brandon-Bravo, ha presentado los resultados de la encuesta, basados en las respuestas de más de 6.000 consumidores en Alemania, Canadá, España, Estados Unidos y el Reino Unido, el 7 de marzo en una presentación en ITB Berlín, la feria de viajes líder en el mundo.
¿Cuáles serán los beneficios de las tecnologías en el medioambiente?
Los viajeros españoles son considerablemente optimistas con respecto a los beneficios de las nuevas tecnologías, y tres cuartas partes (75%) están de acuerdo en que la reducción esperada de emisiones, la descongestión y la disminución en la dependencia de las fuentes de combustible tradicionales mejorarán el medio ambiente y la sostenibilidad del turismo. Muchos viajeros (85%) también destacan que se reducirá el tráfico y un 68% que se aminorará el estrés del viajero, aunque la mayoría (57%) no cree que acabe siendo más barato viajar en el futuro.
¿Cómo esperan las personas viajar en el futuro?
Con respecto a todos los viajeros encuestados (no solo los españoles) y su pensamiento sobre los coches sin conductor en «autopistas inteligentes» – ya en fase de prueba – no sorprende que el 51% de los consumidores espere verlos convertirse en algo normal para el 2030. Este medio de transporte viene seguido por aviones propulsados por combustibles alternativos (36% ) y hyperloops (31%), que ya están siendo desarrollados por una variedad de marcas y nuevas empresas. Menos de un tercio (28%) espera ver el regreso del vuelo supersónico en los próximos 12 años, y esto a pesar de que Concorde ya demuestra que la tecnología funciona y de las afirmaciones de fabricantes como Boom Supersonic de que los vuelos comenzarán su actividad en 2022.
¿En qué tienen menos confianza?
Sin embargo, cuando se trata de aviones sin piloto o drones autónomos que transportan pasajeros, los viajeros preguntados son mucho más cautelosos en cuanto a sus expectativas, solo uno de cada cinco cree que se convertirán en la norma para 2030. De hecho, tal es el escepticismo , que un porcentaje significativamente más alto (38%) declara que preferiría correr el riesgo de teletransportarse – una tecnología que por cierto aún no existe -, para ir o venir de sus vacaciones.
La confianza en la tecnología de un vuelo autónomo es muy baja entre los encuestados. Solo el 7% admite tener preferencia para utilizarlo en comparación con aviones propulsados por combustibles «alternativos» (32%) o un avión supersónico (31%). En general, más de tres cuartas partes (76%) de los consumidores de todo el mundo no confiarían en la tecnología sin piloto, y el 78% de los viajeros afirman que estarían ‘muy’ o ‘bastante’ preocupados por su seguridad y fiabilidad, en comparación con el 55%, tanto para aviones supersónicos como hyperloops.
Joel Brandon-Bravo comenta: «Los avances en automatización, inteligencia artificial, diseño y materiales, y pura necesidad, se combinan para impulsar una revolución en la forma en que viajaremos y haremos nuestras vacaciones en el futuro. Pero nuestro estudio enfatiza que hay una brecha de confianza que debe ser superada. Solo el 8% de los encuestados en todo el mundo dijeron que se sentirían cómodos volando en un dron, por lo que un mensaje claro que deberían recibir los empresarios y organizadores que se apresuran a emprender en este nuevo mercado es que, antes de acometer iniciativas en ese sentido, la gran mayoría de sus clientes potenciales deberían estar convencidos de su seguridad y fiabilidad «.
¿Qué esperan que sean los principales inconvenientes de esta tecnología?
Además, esos mismos empresarios también han de saber que las personas suponen que estas nuevas formas de viaje estarán disponibles para que solo unos pocas las disfruten. Ocho de cada diez creen que serán un lujo que solo una minoría podrá permitirse, y un 60% duda de que serán viajes más asequibles. Solo el 4% de los encuestados declara que está dispuesto a pagar «mucho más» de lo que gasta ahora en sus viajes de vacaciones. Esta no es una buena noticia cuando habrá que afrontar un enorme desarrollo inicial y costos de infraestructura.
Por tipo de transporte, los consumidores tienden a asociar la velocidad con la conveniencia, demostrando una ligera disposición a pagar ‘mucho más’ por hyperloops (un promedio del 7% en Alemania, España y Francia, España) y vuelos supersónicos (10% en el Reino Unido, 17% en los EE. UU.) según la encuesta, que son ambos medios de transporte que también asocian más con las percepciones de lujo y conveniencia.
Sin embargo, cuando la automatización ha eliminado la necesidad de conocimientos o habilidades humanas, como aviones sin piloto o automóviles sin conductor, los viajeros expresan una fuerte expectativa de pagar menos por el uso de dichos formas de transporte en el futuro. En Alemania, España, los EE. UU. Y Francia a, alrededor de un tercio de los consumidores quieren que el precio del billete sea más bajo en comparación con un viaje similar que podrían tomar hoy en un vehículo equivalente.
Con el aumento de viajes aéreos (IATA estima que el número anual total de pasajeros llegará a 7 mil millones en 2038, en relación con los cuatro mil millones este año¹), el número de pasajeros de cruceros crece en un millón anualmente² y un pronóstico de 2.500 millones de automóviles en las carreteras del mundo para 2050³ , está claro que el mundo de los viajes se revolucionará en los próximos años. La pregunta es, ¿estamos listos para sostener este crecimiento?…