El cierre de gimnasios, spas y centros de estética debido a las restricciones de la COVID-19 ha hecho crecer las ventas de saunas domésticas, según confirman desde BeMyPool. Esta tienda online especializada en equipos para piscinas y wellness ha visto aumentar en los últimos meses la demanda de este tipo de productos, que permiten disfrutar del placer de una sauna en la comodidad del propio hogar.
Hasta hace unos pocos años, disponer de una sauna en casa era un “lujo” al alcance de pocos privilegiados. Sin embargo, las innovaciones técnicas han abaratado mucho esta categoría de productos, que vive un notable auge desde que la pandemia llegó a nuestro país. Hoy en día, desde solo 1.500 euros es posible disponer de una sauna doméstica, que se monta fácilmente en una hora entre dos personas y tiene un sencillo manejo y mantenimiento.
Las dos tecnologías de saunas para casa más populares en la actualidad son las saunas de vapor y las saunas de infrarrojos. Las saunas de vapor se basan en el sistema tradicional y cuentan con un habitáculo de madera en cuyo interior hay una estufa eléctrica con piedras, que genera vapor a partir de agua. Por su parte, las saunas de infrarrojos sustituyen la estufa por paneles térmicos que van colocados en las paredes de la sauna. Esto permite conseguir una temperatura adecuada para la sauna con un menor consumo y en menos tiempo. La limpieza y el mantenimiento también son más sencillos. En ambos casos, el espacio ocupado es similar al de una ducha o bañera.
Sea cual sea la tecnología empleada, tomar sesiones de sauna tiene múltiples beneficios para el organismo. Además de ayudar a la relajación muscular y psíquica, mejora la circulación sanguínea y limpia los poros de la piel. También se trata de una actividad de interior ideal para disfrutar con la pareja o la familia, como alternativa a las limitaciones existentes en la actualidad para ir a gimnasios, centros de estética y spas (que aunque estén abiertos en muchos casos han clausurado las saunas y los baños de vapor).
Esto hace que las saunas domésticas se hallen presentes en cada vez más hogares, si bien aún estamos lejos de países como Finlandia, donde la sauna es un hábito diario y se considera la habitación más importante del hogar.
“Las saunas en casa ya eran un artículo crecientemente popular, pero desde el inicio de la pandemia y las restricciones para asistir a gimnasios, spas y centros de estética hemos notado un aumento del interés por este tipo de productos. Solo se necesita disponer de unos pocos metros cuadrados y una reducida inversión para poder disfrutar del placer de tomar una sauna en casa siempre que quieras, así como los beneficios para la salud que ofrecen”, explica Albert Flotats, fundador y director general de la tienda BeMyPool.
