La inquietud por el bienestar, la inclinación hacia lo sustentable y ecológico en las elecciones de consumo, la amplia disponibilidad tanto en tiendas físicas como en línea, han hecho que la industria del cuidado personal con productos naturales y orgánicos esté en constante avance.
El mercado mundial de la cosmética orgánica ha experimentado un fuerte crecimiento. En 2022, su valor rondaba los 28.900 millones de dólares, representando aproximadamente el 11% de la industria cosmética global. Se estima que este valor superará los 50.100 millones en la próxima década, reflejando la tendencia hacia una belleza más consciente y responsable, según datos de Statista, enero 2024.
Un punto importante a prestar atención de su avance, tiene que ver con la edad de los consumidores. Los jóvenes menores de 24 años, conocidos como la Generación Z, son quienes muestran mayor disposición a pagar por artículos libres de ingredientes sintéticos o químicos. Además, la mayoría de ellos confía en las opiniones de influencers en línea, lo que ha llevado a grandes marcas a asociarse con celebridades, quienes tienen una gran llegada no solo en la Generación Z, sino también en los millennials. Este grupo de consumidores, de entre 25 y 40 años, también muestra un alto interés por los productos de belleza ecológicos. En Europa, por ejemplo, alrededor del 72% de las personas de este rango de edad los utiliza, superando incluso ligeramente la tasa de uso entre los miembros de la Generación Z.
Este tipo de cosmética se caracteriza por el uso de ingredientes naturales y orgánicos en la formulación, evitando el empleo de sustancias químicas nocivas para la salud y el medio ambiente. Este enfoque se alinea con la creciente conciencia ambiental y el interés de los consumidores por artículos más seguros y sostenibles.
Una de las principales razones que impulsan su crecimiento es la preocupación por los efectos negativos de ciertos ingredientes químicos en la piel y el organismo. Cada vez más personas buscan alternativas saludables y libres de tóxicos para cuidar su piel y reducir la exposición a sustancias nocivas.
Además, se enfoca en la sostenibilidad y el respeto por el medio ambiente. Esto se traduce en prácticas como el uso de envases reciclables o biodegradables, la reducción de residuos y la implementación de procesos de producción más ecoamigables.
Otro factor que impulsa su avance es el cambio en las regulaciones y normativas. Cada vez más países y organismos gubernamentales están promoviendo el uso de ingredientes naturales y la reducción de químicos perjudiciales en productos cosméticos, lo que incentiva a las marcas a desarrollar líneas ecológicas.
La tendencia hacia una vida más saludable y consciente, también impulsan su auge. Hoy los consumidores buscan artículos que no solo embellezcan, sino que también cuiden y respeten su piel y el entorno. Esta evolución hacia una industria más ética y responsable augura un futuro prometedor para las marcas que apuestan por la ecología y la calidad.
“Cuidar nuestra piel con productos naturales y orgánicos, nos proporciona salud y bienestar, así, nuestra piel muestra toda su belleza natural”, comentan en Niuviu.
Con el aumento de la sostenibilidad, las regulaciones más estrictas y el consumo de las nuevas generaciones, se espera que esta tendencia continúe creciendo y marcando un cambio positivo en la industria cosmética hacia un enfoque más consciente y responsable.