Con más de 70 años a sus espaldas, Industrias Licoreras de Guatemala (ILG), presume de sus recetas, con más del 95% de materias primas guatemaltecas para su elaboración.
Casa Botran, que pertenece a ILG (Industrias Licoreras de Guatemala), elabora rones dentro de la Denominación de Origen Rones de Guatemala, la única D.O. reconocida en la Unión Europea.
Junto con González Byass, empresa jerezana fundada en 1835, busca sus orígenes burgaleses, desde donde emigraron hace más de 75 años sus familiares en busca de suerte a Centro América, desembarcan nuevamente en España para traer su éxito representado en el ron Botran Cobre que une la tradición europea de los licores con las materias primas del nuevo país que los vio crecer empresarialmente.
Una receta que pasa de generación en generación
Si hay algo que caracteriza la gastronomía y sabores guatemaltecos es la mezcla de especias y, en el caso del ron Botran Cobre, más.
Cardamomo, canela, clavo o jengibre se unen a la destilación con miel virgen de caña de azúcar – producto solo utilizado en el 3% de los rones a nivel mundial como alternativa a la melaza, algo que en sí ya hace este licor único- en una micro destilería a través de alambiques de cobre para nutrirse de los matices que le imprimen su carácter.
Tras 20 años de solera, sello de la tradición Botran, se combinan así distintos rones de edades y cualidades variadas en su catálogo y que envejecen y enriquecen a más de 2300 metros sobre el nivel del mar que permite el territorio de Guatemala.
Es así como se consigue ese sabor largo y complejo que permite experimentar, degustar y disfrutar sus matices con esas notas olfativas ligeras y su color cobre pulido.
