El sector vinculado a la instalación de tarimas ha experimentado un crecimiento sostenido en los últimos años, en parte por la incorporación de nuevas tecnologías que han simplificado las tareas vinculadas al montaje de este tipo de revestimientos. En décadas anteriores, la colocación de tarimas exigía procedimientos complejos, que requerían adhesivos, herramientas específicas y tiempos prolongados de ejecución. En la actualidad, la disponibilidad de sistemas más simples y directos ha modificado el panorama, con especial protagonismo del sistema de ensamblaje por clic, que permite una unión precisa de las piezas sin necesidad de pegamentos ni clavos.
La instalación de tarimas en Madrid ha incorporado de forma ágil este tipo de avances, extendiendo su uso tanto en proyectos profesionales como en intervenciones realizadas por particulares. La disponibilidad de estas con sistemas de clic ha permitido a los usuarios realizar esto de manera más autónoma, sin depender necesariamente de servicios profesionales. Esta tendencia ha contribuido a una mayor accesibilidad en el mercado de suelos, permitiendo a más personas disfrutar de los beneficios en sus hogares o espacios comerciales.
Una de las variantes que más ha crecido en el mercado es la tarima flotante. Esta modalidad no requiere fijación directa al suelo, sino que las piezas se colocan sobre una base aislante. Esta técnica permite una instalación más rápida y facilita el reemplazo en caso de daño o actualización del diseño del ambiente. La posibilidad de desmontar sin afectar la superficie original se ha vuelto un argumento recurrente entre quienes optan por soluciones temporales o reversibles en entornos residenciales o comerciales.
La evolución también alcanza los materiales con los que se fabrican estas tarimas. Las opciones actuales ofrecen mayor resistencia al uso intensivo y a factores como la humedad. Entre ellas, las de vinilo ocupan un lugar destacado por su bajo mantenimiento y adaptabilidad a distintas condiciones. Asimismo, tecnologías como la impresión digital han ampliado la gama de diseños disponibles, permitiendo que los fabricantes ofrezcan modelos con imitaciones de madera, piedra u otros acabados, atendiendo así a diferentes preferencias estéticas sin comprometer la funcionalidad del producto.
Por otra parte, las exigencias del mercado en relación con el impacto ambiental han promovido prácticas más sostenibles por parte de los fabricantes. El uso de materiales reciclados y la certificación de la procedencia de la madera utilizada son algunas de las medidas implementadas para reducir la huella ecológica de estos productos. “Estas prácticas responden también a una mayor demanda de transparencia y responsabilidad ambiental por parte de los consumidores, que priorizan productos alineados con criterios de sostenibilidad”, agregan desde Fergopark, empresa líder en el rubro.
La incorporación de estas tecnologías también ha tenido un efecto en la dinámica del sector. La posibilidad de instalación sin intervención profesional ha cambiado el rol de los instaladores, que ahora ofrecen servicios más especializados, orientados a proyectos complejos o personalizados. A la vez, la presencia de productos accesibles ha abierto oportunidades en el mercado de mejoras para el hogar, donde muchos usuarios optan por realizar las tareas por cuenta propia.
El acceso a herramientas de montaje simples, la disponibilidad de diseños variados y la facilidad de recambio han modificado la manera en que se planifican las reformas de interiores. Esta transformación no solo afecta al ámbito residencial, sino también al comercial, donde la agilidad en las obras y la posibilidad de modificar superficies con frecuencia resultan factores decisivos.
El avance de nuevas tecnologías y procesos ha tenido un impacto directo en la instalación de tarimas, promoviendo una oferta más amplia, flexible y alineada con las necesidades actuales. La progresiva adopción de estos sistemas anticipa una evolución constante del sector, en la que se espera el desarrollo de nuevas soluciones que faciliten la colocación, reduzcan los tiempos de obra y amplíen las posibilidades de diseño sin descuidar los aspectos funcionales.