El alma, así como el cuerpo, debe ser alimentada. Los sentimientos son parte importante de nuestras vidas y demostrarlos no constituye una debilidad, por el contrario, es fortaleza.
Encontrarnos con nosotros mismos, buscar nuestra propia esencia se ha vuelto una necesidad para el hombre moderno, que envuelto en la ansiedad de un mundo cada vez más desconectado de lo que sentimientos, busca imperiosamente fluir con lo que lleva dentro.
Rimas para el alma, de La vida es poesía, una colección de poemas, busca que el lector recorra su sentir y se conecte con la profundidad de su alma y, en consecuencia, con su humanidad, aquella que parece perdida en el tiempo.
María Roxana Muñoz, poeta chilena, ha dedicado sus versos al amor, al verdadero, aquel que se siente en lo más profundo del corazón, el que nos pertenece por naturaleza, y al que hemos renunciado por lo superficial.
Al mundo le hace falta poesía, carece de emociones, la frialdad en la que se desenvuelve es abrumadora, es como un invierno que no quiere renunciar a su dominio. Y, aun así, el ser humano busca a diario un refugio donde descubrir su verdadera misión en esta tierra: amar a otros y encontrarse a sí mismo.
La poesía viene a salvarnos, ha descongelar nuestras emociones, a enseñarnos que amar es parte importante de nuestro paso por este mundo. La poesía es la libertad de sentir lo que llevamos dentro.