Durante 12 años, Benjamin Netanyahu fue el hombre fuerte de Israel. Durante ese tiempo esquivó con aplomo todos los intentos de destituirlo, incluso saliendo victorioso de un juicio por corrupción.
Sin embargo, el pasado 13 de junio, su antiguo aliado Naftali Bennett logró desplazarlo del poder y ha sido nombrado nuevo Primer Ministro de ese país.
Todo lo que hay que saber sobre el nuevo Primer ministro de Israel
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Naftali Bennett
Naftali Bennett nació en Israel en el año 1972 y pertenece al partido político Nueva Derecha, aunque durante un tiempo militó en las filas de la organización Casa Judía. En el gobierno de Netanyahu ocupó el cargo de asistente principal y jefe de gabinete, ocupándose también de los ministerios de educación y defensa.
Las diferencias entre Bennett y Netanyahu se produjeron después de que el anterior Primer Ministro aceptara desacelerar la construcción de los asentamientos. Según Naftali, esta situación no debía permitirse ya que era algo contrario a los intereses del pueblo.
El nuevo mandatario israelí posee importantes inversiones que lo han convertido en un hombre acaudalado. Asimismo, dice sentirse orgulloso de pertenecer a la derecha, afirmando que está comprometido con darle a Israel la majestad que se merece.
Aunque los simpatizantes de Netanyahu califican al nuevo mandatario como un traidor, Bennett ha expresado en muchas ocasiones que su movimiento político lo que intenta es lograr la total unificación del país.
Ortodoxo moderno
Naftali Bennett será el primer gobernante israelí en utilizar el Kipá o gorro tradicional que es parte de la indumentaria de todos aquellos llamados judíos devotos.
Aunque vive en la zona más rica de Tel Aviv, constantemente promueve la creación de asentamientos que, según ha expresado, deben mejorar sus condiciones para hacer que los ciudadanos de su país,tengan una vida más fácil.
Muchos consideran que la presencia de un judío ortodoxo en el gobierno es un cambio generacional importante, ya que viene con ideas nuevas y frescas, así como la experiencia adquirida en el sector privado, que pueden beneficiar enormemente a la población de Israel.
Algunos lo consideran un nacionalista judío que no es dogmático, sino que por el contrario, no es piadoso y es amigo de la fuerza para acabar las injusticias y cambiar las ideas.
Rechazo a un estado palestino independiente
Bennett ha manifestado que es totalmente contrario a la idea de crear un estado palestino independiente en Cisjordania y Gaza. Se recuerdan sus declaraciones en el año 2018, cuando manifestó que de estar en el poder no les daría ni un centímetro más de tierra a los árabes, y que los israelíes debían eliminar esa idea de creer que, por regalar su territorio, el mundo los consideraría buenas personas.
El Primer Ministro ha manifestado que si se quiere llegar al camino de la paz, no debe ser dando grandes concesiones a los árabes, y que el estado debe hacer valer su poder para proteger a su pueblo.
Si se cumpliera lo establecido en el plan para la gestión del conflicto que Naftali Bennett público en el año 2012, debería eliminarse la llamada línea verde, que no es otra cosa que una demarcación establecida para crear límites entre Israel y los territorios palestinos.
Incluso, podría prohibir el ingreso de exiliados árabes a su territorio para evitar que estas minorías aumenten y se acabe con la ventaja demográfica que sus conciudadanos tienen en la actualidad.
Ideológicamente, por ser un líder de derecha, es probable que el Primer Ministro haga unos cambios positivos en la economía de Israel, pero sin dejar a un lado el proceso que piensa llevar a cabo de reorganización de los asentamientos y ciudades de la nación.
Por otra parte, se cree que fortalecerá la presencia castrense en las diferentes fronteras, así como todo el aparataje militar, puesto que es factible que Hamas reinicie los ataques producto de las acciones que tomará el actual mandatario en contra de los palestinos.
Naftali Bennett es un fiel creyente del libre mercado y de que los precios de los productos deben ser regidos por una sana competencia de oferta y demanda. Asimismo, ha manifestado que se debe incentivar el nacimiento de las empresas privadas en esa nación, ya que estas vienen a representar el motor de crecimiento económico.
Por otra parte, ha dicho que no es contrario a la implementación de programas de ayuda social, sobre todo para ancianos y discapacitados, así como para cualquier persona que se encuentre en una situación desfavorecida desde el punto de vista social y económico.
Ha planteado que la planificación urbanística de Israel debe mejorarse y que por ello deben cederse tierras, especialmente en las regiones de Neguev y Galilea, a grupos específicos de israelíes, por ejemplo, a los veteranos de guerra que no viven como se merecen después de haber proporcionado un servicio a la nación.
Para el nuevo Primer Ministro, dicha planificación urbanística aumentará la presencia de empresas constructoras que generarán gran cantidad de empleos, lo que producirá mejoras en la economía del país.
Desde el punto de vista social, Bennett ha mencionado que debe hacerse una mejora en el sistema de instrucción de las escuelas públicas, ya que considera que no solo deben adecuarse a los nuevos tiempos sino que el curriculum escolar debe permitir a los niños y jóvenes que conozcan realmente la historia de Israel.
Por otra parte, el Primer Ministro es totalmente contrario al matrimonio entre personas del mismo sexo, por lo que se espera haga fuerte resistencia ante cualquier solicitud sobre este tema en el parlamento, donde, por cierto, cuenta con 7 escaños.
Fruto del gobierno de Naftali Bennett
Como se sabe, el actual mandatario llegó a este cargo gracias a una coalición de partidos que lograron desplazar a Benjamin Netanyahu.
Según lo acordado, Bennett se mantendrá en el poder durante dos años y posteriormente será reemplazado por Yair Lapid, líder del partido Yesh Atid, quien debería comenzar a gobernar a partir del 13 de junio del año 2023.
Para algunos analistas internacionales, el panorama luce complicado, ya que esa coalición de partidos de derecha, izquierda y centro, puede terminar fracturándose, cambiando totalmente el juego político en Israel.