En las playas de todo el mundo es habitual ver a bañistas lanzándose un frisbee o disco volador. Es una de las clásicas actividades de entretenimiento que se pueden realizar junto al mar. Sin embargo, un deporte practicado con discos voladores se está convirtiendo en mucho más que un mero entretenimiento de verano. Nos referimos al Ultimate Playa. Y ha quedado demostrado este fin de semana, en Royan, Francia, que los equipos españoles de Ultimate Playa están en la élite de este deporte a nivel europeo.
Especialmente exitoso ha sido para el equipo tinerfeño de Guayota, que se ha alzado con la primera posición en la categoría tanto femenina como masculina. En categoría mixta, donde hombres y mujeres juegan juntos en el mismo equipo, Corocotta, uno de los equipos de Santander, se ha alzado con la cuarta posición de entre los 21 mejores equipos mixtos europeos.
El resto de equipos españoles también ha realizado un enorme papel. En categoría femenina Cassalletes ha finalizado en 6º posición, Parrochas 7º posición, y 9º posición para Cremas, de un total de 12 equipos femeninos. En categoría masculina Sharks ha conseguido la 5º posición, Quijotes la 7º posición y Polbo ha terminado en 8º posición de un total de 20 equipos. En categoría mixta, la 6º posición ha sido para Disckolaris, y la 10º posición para Disctérics, de entre un total de 21 equipos. En el apartado de Espíritu de Juego, el equipo femenino de Cremas ha obtenido la primera posición.
Estos fantásticos resultados de los equipos españoles a nivel europeo no son nada nuevo, ya que el año pasado en este mismo campeonato europeo de clubes, Guayota se hizo con el oro en la categoría mixta. Fendisc, equipo masculino de Santander también obtuvo la primera posición, y Cassalletes, equipo femenino de Valencia, se hizo con la plata.
En los últimos años, este deporte ha vivido un gran crecimiento en España. El Ultimate Playa cuenta además con un marcado carácter integrador. Existe la categoría femenina, mixta y masculina. Al ser un deporte sin contacto físico, los jugadores evitan el choque ya que está castigado con falta. Otra característica distintiva es que es auto arbitrado y son los propios jugadores los responsables de conocer y aplicar las normas. Al final del partido se hace un rondo con el otro equipo para debatir las jugadas polémicas y se valora el espíritu de juego del equipo contrario. El ritmo es trepidante: Existen dos zonas de anotación en los extremos como en el rugby, pero a diferencia de éste se puede pasar el disco en cualquier dirección. Se anota un punto recibiendo un pase en la zona de gol. Cuando alguien recibe el disco, sólo puede pivotar y tiene 10 segundos para soltar el disco. Si el disco tras un pase toca el suelo o cae fuera del campo, hay cambio de posesión.
En el año 2015, el COI declaró el Ultimate como deporte olímpico, pero todavía no ha entrado como deporte oficial en ningunos Juegos.
En España, el Consejo Superior de Deportes aún no ha reconocido el Ultimate como deporte, por lo que los jugadores no reciben ningún tipo de ayuda para estos torneos internacionales. “Es un problema porque hay que desplazarse mucho para jugar y pagamos todo nosotros mismos.”, declara Cristina Navasa, jugadora de Guayota.