Loogic nació en 2003 para dar voz a esa nueva corriente que se empezó a poner en marcha en nuestro país en términos de startups, emprendimiento y también, por qué no, proyectos tecnológicos en ciernes.
Javier Martín, uno de sus fundadores, sabe bien de lo que habla. Lleva años impartiendo clases en distintas universidades y postgrados sobre el tema y es de los pocos que ha visto cómo algunas de las start up más innovadoras se han gestado casi desde los inicios.
Loogic es una publicación que se puso en marcha en 2003 centrada en las start ups, ¿qué diferencia y evolución ha sufrido este tipo de emprendimiento en los últimos años?
La situación ha cambiado muchísimo. En esos momentos había muy pocos emprendedores montando proyectos digitales y apenas había inversores o instituciones que apoyasen a esos emprendedores. Ahora hay miles de nuevos emprendedores cada año en lo que al sector tecnológico se refiere, también hay cientos de inversores, aceleradoras, fondos de inversión, programas de fomento de emprendimiento y todo tipo de iniciativas relacionadas con el mundo de las startups. Desde Loogic hemos intentado apoyar desde el principio a este ecosistema y estamos muy satisfechos de haber podido ser testigos desde prácticamente sus inicios.
¿Por qué centrarse y especializarse en los nuevos proyectos empresariales?
Lo que nos hemos dado cuenta es que lo que mejor sabemos hacer es ayudar a los emprendedores en sus inicios, pensamos que es donde más ayuda necesitan y donde nosotros podemos aportar más valor. Además los propios emprendedores recurren a nosotros, ya sea a través de la web, por los eventos que organizamos o en los que participamos, por lo que nosotros lo que realmente estamos haciendo es responder a esa necesidad e intentar ser de utilidad.
¿Qué falta en este país para terminar de apostar y creer en el concepto Start up, tan defendido y apoyado en países como Estados Unidos gracias a los denominados business angels?
De manera concreta podríamos decir que lo que más falta son casos de éxito. En Estados Unidos los emprendedores están muy bien valorados porque han creado productos que usan millones de personas y han hecho ganar mucho dinero a mucha gente. Pero aquí aún no estamos en ese punto. Quizás una de las cosas que se podría hacer para mejorar la situación es que las grandes empresas vean a las startups como una oportunidad para innovar. En España aún son pocas las empresas que realmente están trabajando codo con codo con emprendedores para desarrollar estrategias de innovación. Es cierto que cada vez hay más iniciativas al respecto, como puede ser Open Future de Telefónica y Open Talent de BBVA, pero tienen que ser muchas más y sobre todo tienen que ser iniciativas en las que se profundice mucho más en la relación entre empresa y startup, para que finalmente ambas organizaciones puedan lograr un beneficio importante por esa colaboración.
Aparte de dirigir junto con el resto de socios Loogic también das clases en universidades y postgrados, ¿qué espíritu emprendedor tienen en la actualidad los jóvenes? ¿qué se palpa en las aulas?
Por suerte para mi en los lugares en los que yo doy clase vienen jóvenes motivados para emprender, pero entiendo que esto no siempre es así y tampoco se trata de convencer a nadie para que emprenda. Creo que los jóvenes tienen que ver el emprendimiento como una opción pero no como una obligación. Cada persona debe ser libre de probar, experimentar, equivocarse y si ve que encaja con sus intereses, entonces lanzarse a emprender.
Durante unos años la idea de ser autónomo en España era casi una idea vetada para muchos, sin embargo, la crisis laboral abrió los ojos a muchos que vieron el momento de dar el salto, desde tu experiencia ¿cuál es la clave para no tener que echar el cierre antes de lo debido?
Para mi la clave es no asumir demasiadas obligaciones en los momentos iniciales de puesta en marcha de un proyecto empresarial. Lo malo es que la gente se emociona y lo primero que hace es crear la empresa, darse de alta como autónomo, empezar a pagar impuestos, … sin siquiera tener un primer cliente o una primera factura que hacer. Aquí hay que insistir mucho en lo que promueve la metodología Lean Startup y que yo he intentado adaptar al mercado hispano a través del libro Emprender Ligero. Lo primero que debe hacer un emprendedor es saber si realmente existe una necesidad en la gente y encontrar la forma de resolver esa necesidad. Los emprendedores solemos cometer el error de crear una empresa porque sabemos hacer algo o porque tenemos determinados recursos, pero la mayoría de las veces no hemos trabajado en encontrar un problema real que valga la pena responder.
La clave es no asumir demasiadas obligaciones en los momentos iniciales de un proyecto empresarial
Con la llegada de publicaciones también especializadas en este tipo de información, ¿cuáles son los retos de Loogic en el medio plazo?
Sobrevivir es un reto en si mismo, ya que tener un modelo de negocio sostenible para una publicación como Loogic se ha visto que es casi imposible. Nosotros lo hemos logrado durante mucho tiempo por medio de la realización de campañas de crowdfunding y la organización de eventos, pero esperamos que algún día podamos contar con el apoyo de nuestros propios lectores que nos ayuden a hacer sostenible la publicación.
Háblanos ahora de tus libros Emprender ligero y Smartmoney ¿a quién están dirigidos y qué vacío editorial intentan cubrir desde tu punto de vista?
Están dirigidos a emprendedores a los que queremos ayudar a resolver dudas y evitar problemas cuando están poniendo en marcha un proyecto o cuando buscan financiación para hacerlo crecer. En ambos libros he intentado aportar un poco de sentido común para evitar que se cometan muchos de los errores que suelen hacer que los emprendedores fracasen.
El libro Emprender Ligero está escrito sobre todo para motivar a los emprendedores, con ejemplos de mi experiencia personal y con ideas muy concretas que se pueden poner en práctica desde el primer día.
El libro Smart Money sobre todo lo que busca es que los emprendedores entiendan que buscar financiación es un proceso para el que hay que tener una estrategia. En primer lugar es necesario formarse y prepararse para la realización de una ronda de inversión. Esto es algo en lo que muchos emprendedores suelen cometer un gran error, que es lanzarse a hablar con inversores sin tener claras muchas de las cosas que es necesario saber en una negociación con inversores, por ejemplo cosas tan concretas como la valoración de la empresa o el porcentaje de la empresa a entregar a los inversores. Otro aspecto importante del libro es lo que ocurre tras haber conseguido la financiación. Muchos emprendedores ven la realización de una ronda de inversión como un fin no como un medio, por lo tanto una vez que han conseguido el dinero no saben cómo avanzar. Cuando un emprendedor busca financiación tiene que tener muy claro en qué va a invertir el dinero una vez que lo haya conseguido y sobre todo tiene que saber cómo va a poder rentabilizarlo para que realmente aporte valor al proyecto y cuando se haya gastado la empresa pueda seguir siendo sostenible por sí misma.
Por último ¿Nuevos proyectos de cara a 2018? ¿Puedes adelantarnos algo?
Si la verdad es que estoy muy ilusionado por la puesta en marcha de dos nuevos proyectos en los que estoy colaborando y que pienso van a tener un gran recorrido por delante. Se trata de proyectos que utilizan la tecnología Blockchain, que en estos momentos es una de las innovaciones con más posibilidades de futuro.
El primer proyecto es http://dws.io/ y se trata de una iniciativa para desarrollar software que funcione de forma descentralizada sobre la cadena de bloques. Es algo complejo de entender porque el tema aún es muy novedoso, pero para simplificarlo podríamos decir que se trata de una evolución del cloud computing.
El segundo proyecto es http://gamevest.online/ y lo que quiere es ofrecer la posibilidad de que los aficionados a los deportes electrónicos se puedan convertir en inversores de los equipos de eSports. También utiliza para ello la Blockchain y trabaja con lo que se denominan Tokens, que permiten invertir en los equipos, además de con contratos inteligentes enfocados a la gestión de esas inversiones.
Más allá de eso seguiré con la publicación diaria en el blog Loogic y la publicación semanal de la newsletter Futurizable, además de colaborar en los distintos proyectos que vayan surgiendo por el camino.