Mientras Alexei Navalny se encuentra recluido en un hospital de Berlín en un coma inducido, el gobierno de Alemania emitió un comunicado en donde expresó que tienen suficientes indicios que señalan que este opositor ruso fue envenenado.
Navalny ha sido uno de los más férreos críticos de Vladimir Putin. Tanto es así, que ha sido considerado un posible rival de peso en una eventual elección presidencial ya que goza de la aceptación de gran parte del pueblo ruso.
Contenido del artículo:
Es un abogado y político ruso con formación académica en la Universidad Yale. Pertenece al Partido Rusia del Futuro y se convirtió en el principal opositor de Vladimir Putin tras la trágica muerte de Boris Nemtsov en el año 2015.
Alexei fue acusado de malversación de fondos en el año 2013 y condenado a 5 años de prisión, esto no hizo sino acrecentar su popularidad entre la población. Gran parte de sus simpatizantes son conscientes de que el proceso en el que se le incriminó estaba influido por intereses políticos.
En el año 2017 fue golpeado salvajemente y le rociaron desinfectante en los ojos cuando salía de su oficina. Posteriormente, Alexei acuso al partido de Putin, de haber intentado envenenarlo ya que comenzó a presentar serios síntomas de intoxicación tales como hinchazón en los parpados, abscesos en cuello, codos y espalda.
Envenenamiento con Novichok
El 20 de agosto de este año, mientras Alexei volaba desde Siberia hasta Moscú, el avión debió realizar un aterrizaje de emergencia en la ciudad de Omsk. Esto fue debido a que el opositor ruso perdió el conocimiento en pleno vuelo. En tal sentido, fue llevado al hospital donde lo ingresaron directamente en cuidados intensivos.
En las primeras investigaciones, los médicos pudieron constatar que se encontraba intoxicado por alguna sustancia, aunque no llegaron a establecer de qué se trataba exactamente.
Posteriormente, se pudo conocer que lo único que Alexei había ingerido en la mañana de ese día, había sido una taza con té. Se estima que el veneno pudo haber sido colocado allí, con la intención de que la toxina fuese absorbida con mayor rapidez por tratarse de un líquido caliente.
Una vez se hizo pública la situación sobre el envenenamiento de Alexei, Alemania manifestó su interés de ofrecer atención médica al líder político con el fin de establecer la causa que lo llevó a su estado.
El 21 de agosto, el Doctor Aleksandr Murajovski, jefe del equipo médico que atendía a Navalny en el hospital Ruso, informó que no se encontraron restos de toxinas por lo que se descartaba totalmente el envenenamiento. De igual manera informó que el líder ruso no se encontraba en condiciones para ser trasladado.
Sin embargo la esposa Alexei, Yulia Navalnaya dijo en unas declaraciones, que ella creía que los médicos estaban demorando deliberadamente la salida de su esposo del hospital para que la sustancia tóxica desapareciera de su organismo.
Esto generó gran conmoción a nivel internacional y una vez más Alemania expresó su preocupación informando que se encontraban en disposición de trasladarlo hasta Berlín para que fuese atendido por los médicos alemanes.
El 22 de agosto, Alexei fue trasladado hasta el hospital de Berlín donde después de ser sometido a rigurosos análisis, se comprobó que efectivamente había sido envenenado con una sustancia del grupo de inhibidores de la acetilcolinesterasa.
Fuentes gubernamentales alemanas, dijeron que según los resultados de las pruebas realizadas por el equipo médico que atiende el caso de Alexei, este habría sido envenenado con un agente químico nervioso denominado como Novichok.
Se trata de una sustancia conocida como arma química de cuarta generación y aunque no se conoce a ciencia cierta cuando fue desarrollada, se estima que fue a principio de los años 80.
Lo que sí se sabe es que los efectos que genera el Novichok dependiendo de su pureza, pueden ir desde el bloqueo de las señales nerviosas a los músculos, hasta fallos respiratorios y la muerte.
Según expertos químicos, este gas es mucho más sofisticado que el Sarín o VX, por lo tanto, es más difícil de identificar. Puede utilizarse en estado líquido y sólido. Incluso puede esparcirse como un polvo extrafino.
Los síntomas pueden mostrarse en la persona intoxicada con Novichok, en tan solo 30 segundos, pero podrían retrasarse según sea la concentración hasta 18 horas después del contacto.
No es primera vez que un disidente u opositor ruso es envenenado con esta sustancia. Por ejemplo, en el año 2018 el espía Sergei Skripal fue envenenado con Novichok.
Hasta la fecha, la comunidad internacional se ha mostrado consternada por la situación ocurrida con Alexei Navalny y los médicos alemanes se encuentran actualmente en una lucha desesperada por salvarle la vida.
Sin embargo, las posibilidades que Alexei se salve son pocas debido a que la sustancia tóxica que se le aplicó fue de extrema concentración y pureza. En este sentido, el sistema nervioso ha dejado de enviar señales a los músculos de Alexei. Además, se ha tenido que conectar a un respirador artificial con la esperanza que pueda responder.
Posición del Kremlin
Según el portavoz del Kremlin, Dimitry Peskov, cuando Navalny salió de Rusia, en su cuerpo no se habían identificado sustancias tóxicas. Por ello, destacó que es una irresponsabilidad señalar que haya sido envenenado en el país.
Por su parte, Vladimir Putin manifestó que tanto Alemania, Francia y el gobierno británico deben ser cautelosos al emitir opiniones ya que es inaceptable que responsabilicen a Rusia por lo sucedido a Navalny.
Lo que no explica Rusia, es por qué después de que Alexei llevase 24 horas hospitalizado, los médicos expresaron que todas las pruebas realizadas para detectar sustancias venenosas, habían dado negativo. En tal sentido la situación médica del opositor ruso, se debía a un desequilibrio producido por un bajón de azúcar.
En todo caso, el gobierno de Alemania cree que el envenenamiento del que fue objeto Alexei, tuvo como fin evitar que continuara adicionando personas a su causa y que esto pudiese generar una situación en Rusia similar a la de Bielorrusia.