El joven saxofonista de Utrera Manu Brazo actuará como solista en Londres el próximo domingo, día 27, acompañado por la Guildford Symphony Ochestra, en el estreno mundial del concierto “El Jardín de las Delicias” inspirado en el tríptico homónimo de El Bosco. La pieza, compuesta para tres saxofones (alto,soprano y barítono), ha sido creada especialmente para el músico utrerano por el director/compositor de esta formación británica, Darrel Davison.
El concierto de Manu Brazo junto a la orquesta de Guildford tendrá lugar a las afueras de la capital británica el 27 de marzo a las 19:00 horas en el auditorio de Charterhouse School y el programa incluirá la Sinfonía de El Nuevo Mundo de Dvorak, y la Obertura Froissart de Elgar. Manu formó parte del programa para jóvenes intérpretes de esta orquesta inglesa en 2016, tras ganar su concurso solo 1 mes después de mudarse a Londres.
En opinión del saxofonista, “estrenar una obra así, con una formación como la Orquesta Sinfónica de Guildford con la que ya he tocado antes, que me ha dado tantas oportunidades y que me hace sentir tan cómodo, es un privilegio, y aportar al mundo del saxofón un concierto tan interesante, inspirado en una pintura tan excepcional, hace que sea una oportunidad única, muy bonita y que tengo muchas ganas que pase”.
Según ha explicado Manu Brazo, la forma del concierto “El Jardín de las Delicias” se desarrolla en tres partes, cada una representando cada una de las tablas del famoso tríptico de El Bosco con un estilo musical distinto y con un saxofón diferente.” La sensación de movimiento de la pintura, tanto en el espacio como en el tiempo (pasado, presente y futuro) se ve reflejada en la evolución estilística de cada parte del concierto”.
“Una corta pero grandiosa introducción representa el 3er día de la creación, cuando se forman el cielo, los mares y la tierra, en la que el motivo principal es un canto Medieval que interpreta la orquesta sin el solista. En el primer movimiento escuchamos distintas danzas renacentistas, mientras que en el segundo aparecen distintos valses vieneses que desembocan en un tercer movimiento llenos de música de jazz y swing de los años 30 de Berlín”.
Del mismo modo, Manu Brazo ha señalado que “El Bosco en “El Jardín de las Delicias” transforma los elementos pictóricos y los temas en las tres tablas. De la misma forma, en el concierto se desarrollan siete cantos gregorianos que van apareciendo paulatinamente y se van mezclando con otros temas y melodías”.
Tres saxofones distintos
“Además, -ha destacado-,en el concierto actuaré con tres saxofones distintos (alto, soprano, y barítono) en cada pieza, lo que supone un reto extra, ya que se producen cambios adaptativos lo que implica una serie de habilidades técnicas que hay que adaptar a cada uno de los saxos, y esta variedad de instrumentos, tímbrica y de sonidos, aporta mucho más a la música y a la escena, haciendo el espectáculo mucho más interesante”.
“Cada parte, tiene relación con una de las tablas del tríptico y hace que cada historia esté relacionada independiente en cierta forma. Pero, lo interesante es ver como esas historias, esos motivos y esas secuencias se desarrollan independientemente en cada una de las tablas y van apareciendo relacionadas y desarrolladas de formas distintas, según donde nos encontremos, pensando de forma figurada en el tríptico y directamente cómo lo estamos escuchando en el concierto.”, concluye.