El retorno a la vida laboral siempre llega acompañado del temido síndrome postvacacional que los hijos perciben y proyectan en su actitud de vuelta al colegio. Es importante mostrar una actitud positiva y compartir con los hijos los preparativos de vuelta al colegio, convirtiendo el inicio del nuevo curso en una verdadera aventura en la que participa toda la familia.
Para conseguirlo, los colegios CEU hacen sus propuestas para que los padres trabajen con sus hijos desde una dinámica regeneradora e ilusionante.
- Crear unas rutinas de vuelta al colegio que lo conviertan en algo divertido y que los días anteriores (incluso el primer día o la primera semana) las repitan involucrándose personalmente con ellos. Los niños agradecerán la cercanía de los padres y su acompañamiento más que ninguna otra cosa.
- Los niños toman a sus padres como ejemplo y adoptan sus actitudes por lo que, si los padres son conscientes de que su propia actitud de vuelta al trabajo será vivida de forma proyectiva por los hijos, lo mejor es compartir la experiencia con ellos y vivirla “en equipo”, demostrando con el ejemplo y una actitud vital y positiva que volver a trabajar o al colegio tiene muchas cosas buenas.
- Tomarse el tiempo necesario y darle la importancia que merece a este tema. No obviarlo o darlo por hecho porque requiere de una dedicación.
María José Bello, directora del colegio CEU San Pablo Montepríncipe resalta la importancia de “analizar fundamentalmente las cosas positivas que implica el nuevo curso escolar: reencontrarte con tus amigos, conocer niños nuevos, aprender cosas nuevas, excursiones, teatros, actividades…”. Darle un enfoque divertido también puede ayudar en esta etapa “si los padres le hablan de tú a tú a sus hijos y le preguntan, por ejemplo, quién es el compañero con el que mejor se llevan, y cómo son sus compañeros de trabajo, como les recibió su jefe… etc. Mientras que los niños les cuentan sobre sus amiguitos y cómo les recibió su nueva profe”.
Según María José Bello un aspecto a tener muy en cuenta es “expresar explícitamente las ganas que tenemos de volver al trabajo con frases como qué ganas tengo de volver a ver a mis compañeros, ¿a que tú también? Cómo me apetece volver a mi despacho, ¿a qué a ti te apetece volver a tu cole?”
Hacer los preparativos para el primer día juntos (como por ejemplo preparar la ropa que nos vamos a poner para ir a la oficina y probarnos juntos el uniforme o la ropa del primer día), acompañarles en el ese día, asumiendo el momento de la separación como un proceso natural con una despedida corta y afectuosa), darle una dimensión temporal a la asistencia al cole (“Va a ser un ratito lleno de emociones y enseguida otra vez en casa”), volver a la infancia y compartir con los hijos las emociones del colegio, transmitir confianza y darle un enfoque positivo de su colegio (“dentro de poco, más que un colegio será tu gran familia”) son otros puntos en los que María José Bello, directora del colegio CEU San Pablo Montepríncipe ha puesto más énfasis y, una última recomendación, “no olvidar que según actuemos, hablemos y nos comportemos, ellos actuarán, hablarán y se comportarán. ¡No lo olvidemos!”.
Desde el colegio CEU San Pablo Sanchinarro, su director, Carlos Ortiz Sanchidrían, apunta que hay que “ser muy cariñosos con los hijos y marcar objetivos personales académicos para el primer trimestre, acordándolos con ellos para que se comprometan y acompañándolos en todos sus avances, sobre todo en las primeras semanas.” Fomentar la autonomía desde el primer día, “que sean ellos los que se responsabilicen y preparen sus materiales de trabajo” y tener claro que el trabajo diario es la clave para la recompensa final, “no vale decir todavía no hemos hecho nada, cualquier alumno de la etapa que sea ha de dedicar un tiempo de trabajo solo diariamente, aunque sea lectura”
María Luisa Ruiz de Austria, directora del colegio CEU Virgen Niña Vitoria nos recuerda que la alimentación en los primeros días de curso es crucial, “porque los niños están acostumbrados a las rutinas del verano, normalmente más laxas y desorganizadas”. Es importante eliminar de la dieta los “caprichos del verano” y tener en cuenta la tendencia a la obesidad que se está produciendo en los escolares durante los últimos años. “Elegir con ellos las meriendas y almuerzos evitando bollería industrial e incluyendo fruta”. Así como el descanso nocturno es imprescindible para un buen rendimiento en el aula. “nos encontramos a escolares completamente dormidos en las aulas, es importante que las familias controlen las horas que los niños pasan delante de pantallas digitales, sobre todo a última hora de la tarde”
Como indican desde los colegios CEU, el trabajo de estos puntos unidos a una actitud optimista por parte de los padres es fundamentales para que los hijos encaren la vuelta al cole con enorme ilusión y alegría.
Otros consejos:
Actitud frente al uso de las nuevas tecnologías (ordenador, videoconsolas, etc.) Es normal que en verano los niños dispongan de más tiempo para utilizar estos medios, pero a medida que se acerca el curso es recomendable ir acortando el tiempo de uso.
Preferiblemente, se aconseja que no utilicen ni el ordenador, ni el móvil, ni ninguna videoconsola antes de irse a dormir porque ello les sobrexcita más y hace que les cueste conciliar el sueño.
Organizar su ambiente de trabajo y estudio. Es importante que se disponga de un espacio dedicado exclusivamente al estudio, libre de distracciones (televisión, equipo de música, videoconsola, etc.). Almacenar y deshacerse de los objetos viejos y dejar espacio suficiente para poner los nuevos, mantener una habitación limpia y ordenada. Hay que generar un enfoque positivo, potenciando la ilusión que se crea en todo niño/a por estrenar material escolar.
Plantear metas y acordar unos pequeños objetivos sobre el próximo curso. Esos objetivos se establecerán preferentemente por escrito al igual que las recompensas si se cumplen, o las sanciones en su caso si no se respetan. Por ejemplo, preparar la mochila el día antes, hacer los deberes diariamente en el horario acordado o el fin de semana entre el viernes o el sábado por la mañana para así dejar el sábado tarde y domingo libre, etc. Resulta de vital importancia que el niño tenga un papel importante en la negociación, no percibiendo los acuerdos como algo impuesto (disminuye su motivación e implicación), debiendo conocer en todo momento a los acuerdos llegados, las recompensas, los plazos y las sanciones (es recomendable que el documento esté en un lugar visible para el niño/a, preferentemente en el espacio en el que estudia).
