Perú es uno de los países de América latina más afianzados a la cultura indígena. En su territorio, se pueden encontrar gran variedad de artefactos y construcciones prehispánicas.
Sin embargo, la más conocida es “Machu Picchu”. Esta última corresponde a un santuario ubicado en la “Cordillera Oriental” en el sur del país, y es considerada un patrimonio de la humanidad según la UNESCO.
De hecho, su importancia es tan grande que una persona puede ser condenada si causa destrozos en el lugar. De hecho, esta última fue la situación de un grupo de extranjeros que fueron expulsados y condenados por perpetuar daños en el complejo.
La llegada de los extranjeros a Machu Picchu
En la noche del 11 de enero (día sábado), un total de 6 personas consideradas “mochileras”, se adentraron en las profundidades del santuario conocido como Machu Picchu en altas horas de la noche.
Cabe destacar que esta acción fue ejecutada de forma ilegal e intencional, ya que según los turistas, sus intenciones eran pasar la noche en el sitio e irse en horas de la mañana del 12 de enero antes del arribo de las autoridades.
Para entrar, burlaron la red principal y accedieron por atrás para no causar sospechas. No obstante, los guardas parques del sitio los llegaron a encontrar en la madrugada del 12 de enero.
Estos llamaron a la policía, los cuales pusieron en arresto a los personajes, de los cuales se encontraban 4 hombres y 2 mujeres provenientes de Chile, Francia, Argentina y Brasil.
Una vez las personas habían sido llevadas a la comisaria, los guarda parques analizaron el complejo para localizar posibles daños o robos de los artefactos que ahí se encontraban.
En esta práctica, las autoridades encontraron un conjunto de heces fecales en los alrededores del lugar donde habían acampado los turistas. Sin embargo, su descubrimiento más sorprendente fue un terreno hundido en el “Templo del Sol”.
Esto, según lo explicado por los invasores, se formó cuando “Nahuel Gómez” (hombre de 28 años de edad y de procedencia argentina), entró a orinar al complejo y forzó una piedra.
Esta última, debido a su peso, forma y a los 6 metros de altura donde se encontraba, cayó en el suelo creando el pequeño cráter en el sitio.
Acciones tomadas por las autoridades
De los 6 extranjeros que invadieron el lugar, 5 lograron salir de la situación con solo una condicional, y fue su expulsión de tierras peruanas por no más de 15 años.
Estos últimos fueron Cristiano Da Silva (brasileño), Fabián Eduardo Vera (chileno), Marion Lucio Martínez (francesa), Leandro Sactiva y Magdalena Abril (argentinos).
Dicha sentencia fue determinada por un juez local a pocos días del suceso, según los cargos de daños a un patrimonio cultural peruano y al acceso ilegal a sus instalaciones.
Sin embargo, Nahuel Gómez tuvo un destino mucho peor, ya que su sentencia no había sido promulgada sino hasta hace poco. Esto último fue gracias al tipo de daños mencionados anteriormente en el “Templo el sol”.
Cabe destacar que, según las leyes internacionales, les corresponde a las autoridades peruanas tomar cartas en el asunto a pesar de la nacionalidad el individuo.
Es por ello que el pasado 18 de enero, Nahuel fue condenado a 2 años de prisión en suspenso. Sin embargo, después de ese período podrá regresar a Argentina, donde deberá cumplir con tareas comunitarias obligatorias.
A pesar de ello, esta sentencia fue considerada sutil, ya que el “Ministerio Público de Perú”, estaba solicitando casi 4 años de cárcel para el individuo. No obstante, la condena se redujo por una figura procesal tramitada por Nahuel.
Igualmente el “Juzgado Mixto de Machu Picchu” le otorgó una multa al personaje, la cual corresponde a un pago de 1.196 soles (360 dólares estadounidenses) e incluirá otra falta monetaria de 5 mil soles (1.500 dólares estadounidenses) próximamente.
Posición de las leyes de Perú ante la situación
Ciertamente Perú es uno de los pocos países que anteriormente se encontraba abierto a la inmigración y al turismo extranjero en el territorio nacional. Sin embargo, esta situación ha cambiado en los últimos años.
Cabe destacar que esto se debe, en gran medida, a la cantidad de venezolanos que han decidido instalarse en el país, así como al aumento en las tasas delincuenciales producto de esta situación.
Es por esto último que el 22 de julio del año 2019, la “Gerente General de la Superintendencia Nacional de Migraciones”, Frieda del Águila, expuso su intención de comenzar a expulsar a extranjeros.
Ciertamente esta acción se realizaría obedeciendo los estatutos nacionales, y solo si el extranjero incurre en prácticas consideradas no permitidas en el territorio nacional.
No obstante, dicha sentencia solo es realizada si el personaje comete algún atropello a las leyes peruanas de forma leve. En este punto se encuentran daños a la propiedad pública, conducta inapropiada, etc.
Asimismo, los otros actos más abrasivos como asesinato, tráfico de estupefacientes, robos a gran escala, conspiraciones, secuestros e incluso maltrato físico, sí serían penados fuertemente por la ley.
¿Qué leyes peruanas aprueban esta expulsión?
Actualmente, hay un estatuto en Perú donde se propician todos los derechos y deberes que un extranjero posee dentro del territorio nacional. Esta última se conoce como la “Ley de Migraciones”.
En ella, el “Artículo #58” presenta las acciones a tomar en cuenta en caso de que un turista de otra nacionalidad realice un daño al patrimonio cultural del país. En este caso, el artículo expone la “Aplicación de sanciones graves”.
Dicha acción se toma específicamente de la sección 1 de este artículo, respaldando la decisión del juzgado peruano. En este punto, las acciones tomadas en su referencia (incluyendo expulsión y condena a prisión) son totalmente legales.
Sin embargo, se cree que las penalizaciones ejecutadas por las naciones de donde provenían los extranjeros, es decir, Brasil, Chile, Francia y Argentina, serán más fuertes para los invasores.
Por lo pronto, Machu Picchu sigue abierto y solo se mantiene en reparación la sección accidentalmente hundida. No obstante, el turismo sigue estando presente en el complejo.