Pese a que a priori pueda parecer sencillo, decorar con gusto es un arte.
No obstante, antes de ponerse a elegir textiles y objetos decorativos para cualquier estancia, conviene dedicar un tiempo a elegir correctamente los pavimentos, suelos, azulejos y, en definitiva, todo aquello que no resulta de fácil modificación en los hogares dado que en una amplia mayoría de casos requerirá de engorrosas obras.
Pero, elegir adecuadamente estos elementos no es nada sencillo dado que existen en la actualidad un amplio abanico de materiales, con multitud de acabados, texturas y colores, capaces de adaptarse a los gustos de clásicos y modernos. Por fortuna, los especialistas en cerámica y baño están ahí para ayudar a aquellos que poco o nada saben sobre los materiales y características de estos elementos.
Y es que, elegir entre la calidez que proporciona la madera o un gres que simula a la perfección este noble material solo es sencillo cuando se trata de determinadas estancias, mientras que en otras la duda parece difícil de disipar.
Pero, ¿por qué se debe apostar por el gres porcelánico?
El gres porcelánico es una cerámica de pasta compacta cuyo proceso de fabricación implica prensar en seco diferentes sustancias entre las que se encuentran la arcilla, el feldespato, gravilla, arena, así como diferentes minerales.
Entre sus principales características se hallan la practica inexistencia de porosidad, lo que implica que es apta para ambientes húmedos, dado que no absorberá el agua.
Otra de sus principales propiedades es su elevada resistencia a la abrasión, es decir, la resistencia que ofrece la superficie a acciones derivadas del movimiento de cuerpos, superficies o materiales en contacto con ella, lo que hace que esté especialmente indicado para superficies de mucho tránsito.
Por otro lado, su composición hace que sea muy resistente a los cambios bruscos de temperatura, haciendo que este material pueda emplearse también en el exterior, dado que existe la opción antideslizante e, incluso antihielo.
Además, su fácil limpieza y mantenimiento hace que sea una fantástica elección para estancias como la cocina.
Por supuesto, el hecho de que imite materiales naturales como la piedra, el mármol o el granito, por mencionar solo alguno, hace que sea una elección acertada en el tiempo.
