Simplicidad, funcionalidad y materiales naturales. Esas son las principales características que han hecho del mueble de estilo nórdico una tendencia que no pasa de moda y que seguirá en pie este 2024.
Cada vez más, la decoración busca crear ambientes que permitan llegar a casa para descansar en una atmósfera relajante y acogedora, algo que está totalmente relacionado con la elección del mobiliario para cada estancia. Desde las propuestas más clásicas a las más innovadoras y modernas, este estilo minimalista se ha ido abriendo camino también por una característica fundamental: la madera maciza natural.
“No es lo mismo hablar de mobiliario ecológico que hacerlo de madera ecológica. Eso es lo que llevamos trabajando nosotros más de 40 años, la fabricación y tratamiento de muebles en España con madera maciza de origen ecológico, que procede de bosques que son administrados y gestionados de una forma sostenible y en los que se incide mucho en los ciclos de recuperación para conservar sus ecosistemas” explican desde Moblebo, que apuesta por maderas que cumplan la certificación PEFC y Greenguard Gold para barnices.
El estilo nórdico también es versátil y se puede adaptar a diferentes esquemas de diseño de interiores. Por ejemplo, una mesa de madera combinada con sillas en tonos claros puede crear una apariencia moderna y elegante, mientras que un banco de madera con una manta de lana y lino puede agregar un toque acogedor y rústico a una habitación.
Invertir en muebles de calidad fabricados en España, con madera sostenible, implica varias ventajas entre las que se encuentra el ahorrar a largo plazo por la longevidad de las piezas y el comprometerse con un producto ecológico que supone también un compromiso personal.
¿Cuáles son las últimas tendencias en decoración?
Desde hace tiempo, los espacios diáfanos han ido ganando la batalla en las nuevas viviendas y las reformas. La última tendencia en decoración es, precisamente, el uso de estructuras de madera natural para crear ambientes separados dentro de una planta diáfana sin que exista la sensación de cierre de espacio.
Esta tendencia es estéticamente agradable y se puede utilizar para crear espacios separados para diferentes actividades, como un comedor, una sala de estar y un espacio de trabajo sin perder de vista esa sensación de apertura de no tener paredes y permitiendo una extensión del estilo nórdico integral.
“Estas estructuras permiten la separación sin sacrificar la luz natural y el flujo de aire. Por ejemplo, se puede utilizar una mampara de madera para separar un dormitorio de una sala de estar, permitiendo al mismo tiempo el paso de la luz en apartamentos tipo loft” explican desde la empresa, donde están experimentando el aumento de la demanda de separadores de ambientes de madera maciza.
