Mientras el mundo continúa sorteando los efectos del cambio climático, la necesidad de soluciones energéticas sostenibles se ha vuelto más apremiante que nunca. Una de esas soluciones es el uso de placas solares y autoconsumo en Valencia, que han ganado popularidad en los últimos años debido a sus numerosos beneficios.
“En España, el auge de las placas solares ha ido acompañado de la aparición del autoconsumo eléctrico, una práctica que permite a los consumidores generar y consumir su propia electricidad” comentan desde ElectroAndreu Coop.
Los beneficios de las placas solares, la situación actual del autoconsumo eléctrico en España, así como los retos y perspectivas de futuro de las soluciones energéticas sostenibles en el país son un propósito a todos los niveles: usuarios, empresas, instituciones y tercer sector.
Los paneles solares son una forma de energía renovable que aprovecha el poder del sol para generar electricidad. El proceso implica la conversión de la luz solar en electricidad de corriente continua (CC) mediante el uso de células fotovoltaicas (PV), que están hechas de materiales semiconductores como el silicio.
Esta electricidad de CC luego se convierte en electricidad de corriente alterna (CA) mediante un inversor, que puede usarse para alimentar hogares, empresas y otras instalaciones. Uno de los principales beneficios de los paneles solares es su sostenibilidad.
A diferencia de los combustibles fósiles, que son finitos y emiten gases de efecto invernadero nocivos, la energía solar es renovable y no emite contaminantes. Además, los paneles solares requieren poco mantenimiento y tienen una larga vida útil, lo que los convierte en una solución energética rentable a largo plazo. En comparación con otras fuentes de energía renovables como la energía eólica, los paneles solares tienen la ventaja de ser más predecibles y fáciles de instalar en zonas urbanas.
La importancia del autoconsumo eléctrico en España
El autoconsumo eléctrico se refiere a la práctica de generar y consumir la propia electricidad, generalmente mediante el uso de paneles solares u otras fuentes de energía renovables. En España, el autoconsumo eléctrico ha ganado fuerza en los últimos años debido al marco legal y los incentivos favorables del país.
En 2019, España se convirtió en el primer país del mundo en abolir el llamado «impuesto al sol», un gravamen que anteriormente dificultaba a los consumidores la instalación de paneles solares. Como consecuencia de estos cambios, el mercado del autoconsumo eléctrico en España ha crecido significativamente. Según un informe de la Unión Española Fotovoltaica (UNEF), el país añadió más de 261 MW de nueva capacidad solar en 2019, un aumento del 90% respecto al año anterior.
Se pueden encontrar casos prácticos de proyectos de éxito de autoconsumo eléctrico en todo el país, desde viviendas particulares hasta instalaciones comerciales de gran escala.
A pesar de los avances realizados en los últimos años, todavía existen importantes desafíos para la adopción generalizada de soluciones energéticas sostenibles en España.
Una de las principales barreras es el alto costo inicial de instalación de paneles solares, que puede representar una inversión significativa para hogares y empresas. Además, existe una falta de conciencia entre los consumidores sobre los beneficios de la energía renovable y los posibles ahorros de costes.
Para abordar estos desafíos, se han propuesto recomendaciones desde las instituciones, como incentivos fiscales, subsidios y asociaciones público-privadas. El gobierno español ya ha dado pasos en esta dirección, con la introducción de un nuevo marco regulatorio en 2019 que tiene como objetivo promover el uso de energías renovables también en los hogares españoles.
