Si se opta por vivir en un piso de alquiler y se quiere renovar al gusto sin necesidad de realizar reformas y de forma rápida y económica, existen una serie de ideas que pueden ser de gran utilidad.
¿Cuáles pueden ser las soluciones? 5 opciones low cost que lo cambian todo
Suelos nuevos, hogar nuevo
¿Qué tal cambiar y actualizar el suelo del piso de alquiler? Una forma de cambiarlos sin necesidad de reformas es poniendo encima alfombras vinílicas.
“Se pueden poner cubriendo todo el suelo o solo una parte. Son muy fáciles de colocar y limpiar y están disponibles en una infinidad de modelos. De hecho, cada vez se venden mejor porque se pueden incluso fabricar a la medida que se necesite” explican en Printodecor.
Cambia las luces
La luz cálida e incluso algunas indirectas siempre añaden un cambio a las estancias. Habitualmente, los pisos de alquiler suelen tener luces frías y básicas. Por eso, una forma fácil y económica de transformar un espacio es cambiar las luces e incluso lámparas, ¡la diferencia será increíble!
Llena los espacios de fotografías y cuadros
No hay nada mejor que decorar y personalizar un piso de alquiler con alguna pieza artística que signifique algo y que refleje la personalidad de quien lo habita o, incluso, algún cuadro con una fotografía familiar.
Los cuadros son siempre elementos decorativos que acompañarán en todas las mudanzas y harán de cualquier espacio, un hogar. Además, ya no hace falta taladrar la pared para colocarlos, ¡se pueden poner con adhesivos!
¡Redecorar el baño y la cocina!
La cocina y el baño son dos estancias muy importantes en el hogar por eso, es necesario que gusten.
Uno de los elementos que menos suelen cuadrar son los azulejos
¿Qué se puede hacer para cambiarlos? Optar por pintarlos y, si esta opción no está permitida, apostar por los vinilos decorativos pueden ser una muy buena opción ya que se colocan sobre las baldosas y dan la sensación de estrenar espacio.
Cortinas con nuevos colores y estampados
Los textiles son los grandes olvidados en la decoración, pero aportan mucha personalidad. Por eso, una de las maneras de dar otro aire a una estancia es cambiando los textiles y, sobre todo, las cortinas.
