La adaptación de la normativa y trámites a los territorios, la adecuación de los fondos europeos de cohesión a las necesidades de las regiones y la simplificación de los trámites administrativos impulsarían el uso, y mejorarían la eficiencia de los fondos de la política cohesión de la UE para ayudar a frenar la despoblación en Aragón. Estas son algunas de las conclusiones del evento Living Lab Aragón celebrado en Belchite (Zaragoza).
En este foro, el primero que tiene lugar en el marco del proyecto CohesionLabEU, se han identificado algunas de las necesidades que tienen las zonas de baja densidad demográfica de la región como la formación para mantener los oficios y gremios rurales, un parque público de viviendas en los municipios pequeños, o mejores servicios de conectividad, digitalización y movilidad, que son susceptibles de financiarse por los fondos de la política de cohesión de la UE.
Más de 60 personas han asistido a esta jornada que tenía como objetivo promover el conocimiento y el uso de los fondos de cohesión europeos en las regiones aragonesas en riesgo de despoblación, además de abrir un canal de comunicación entre instituciones, la Administración Pública en sus diversos niveles y ciudadanos para tratar las necesidades reales de estas áreas y que se tengan en cuenta en la planificación y gestión de esta herramienta de financiación europea.
El foro contó con la participación de Isabel Martín-Retortillo, directora general de Financiación y Fondos Europeos del Gobierno de Aragón, Juan Manuel Hernández, director general de Despoblación de la comunidad autónoma, Esteban Molina, subdirector general de Desarrollo Urbano de la Dirección General de Fondos Europeos del Ministerio de Hacienda y Función Pública; Miguel Ángel Pérez Grande, asesor del Gabinete del secretario general de la Secretaría General para Reto Demográfico del Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico, Valentina Corsetti, jefa de Programas de España y Portugal de la DG Regio de la Comisión Europea y Ángel Adell, director del proyecto CohesionLabEU, que contestaron a las preguntas realizadas por el público.
Durante el evento se presentaron, además, los casos de la empresa Bejuser Industrias, S.L., de la Comarca del Maestrazgo (Teruel) y del Centro Tecnológico Rural como ejemplos de proyectos que han recibido financiación de los fondos europeos de cohesión.
Herramienta para el desarrollo territorial
Con más de 36.600 millones de euros, España será el tercer país de la Unión Europea que más se beneficie de los fondos de cohesión europeos, como los FEDER, el Fondo Social Europeo + (FSE+) y el Fondo de Transición Justa, en el período entre 2021 y 2027. Estos fondos son una de las fuentes de financiación que la UE pone a disposición de sus ciudadanos para impulsar el desarrollo de sus territorios.
Aragón destinará 560 millones de euros de fondos FEDER y FSE+ hasta 2027, de los que el 40 por ciento procederán de la Unión Europea. Con ellos, se financiarán proyectos de I+D, digitalización de empresas, organizaciones, ciudadanos e instituciones, de eficiencia energética en centros educativos y sanitarios, la reutilización y reciclado de residuos, la descontaminación y rehabilitación de espacios contaminados por el lindano; programas para fomentar el empleo y la inclusión social.
CohesionLabEU es un proyecto cofinanciado por la Unión Europea para crear una comunidad de aprendizaje que impulse la aplicación de la política y fondos europeos de cohesión en los territorios españoles en declive demográfico, especialmente en Aragón, Castilla y León, Castilla La Mancha y Extremadura. En el marco de esta iniciativa, se incluye la celebración de cuatro Living Lab, como el celebrado en Belchite, siete talleres de formación y tres cursos de especialización en fondos europeos de cohesión, además de un premio al mejor proyecto financiado con fondos europeos.
