Zhang Zhan, quien informó de forma abierta sobre los inicios del Covid-19 en Wuhan, ha sido condenada a 4 años de prisión. Esto, porque supuestamente publicó información falsa, con respecto al manejo que el gobierno de Xi Jinping le estaba dando al virus.
Aunque el Partido Comunista Chino, nunca se ha caracterizado por ser respetuoso de la libertad de expresión, esta condena ha causado conmoción en el mundo ya que según analistas internacionales, ese gobierno trata de ocultar los verdaderos orígenes de la enfermedad.
Qué ha causado el revuelo que ha condenado a Zhan; las claves para comprenderlo
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Zhang Zhan, periodista, abogada y altavoz
Esta joven periodista y abogada viajó en el mes de febrero de este año hacia la provincia de Wuhan con el fin de conocer, de primera mano, lo que estaba sucediendo con el Covid-19.
Quienes conocen a Zhang Zhan, la califican como una mujer frontal y decidida quien no se amilana ante los retos y quien ha tratado desde la aparición de la enfermedad, lograr que se diga que fue lo que realmente ocasionó la aparición del virus y su posterior propagación por el mundo.
Es por ello que, al no confiar en el aparato de propaganda chino, utilizó sus redes sociales con el fin de reportar la situación que estaban atravesando los centros de salud de Wuhan.
Al parecer, las noticias que daba el gobierno chino no eran del todo ciertas y la cantidad de enfermos era mucho mayor que la que reportaban a diario – tal como se ha podido constatar con posterioridad -.
Lo que era peor aún, dijo Zhang en una de sus redes sociales, era que el número de fallecidos aumentaba considerablemente y el gobierno desestimaba el alarmante incremento.
En el mes de abril, la periodista y abogada fue llamada por el Partido Comunista Chino a declarar y en el mes de mayo, se le ordenó alejarse de cualquier red social por lo que no volvió a enviar más mensajes a familiares y amigos, a través de estos medios.
Ya a mitad de año, fue acusada formalmente de pretender causar conmoción y romper con la tranquilidad y la paz de los ciudadanos chinos, haciendo publicaciones consideradas para el gobierno como falsas.
Proceso Judicial de Zhang Zhan, ¿con garantías?
En el mes de junio inicio el proceso jurídico de esta periodista donde, según algunos juristas, se viola de manera flagrante la legitima defensa. Así mismo, la acusada permaneció detenida desde el momento en que comenzaron las deliberaciones.
A pesar que los abogados de Zhang presentaron elementos que demostraban que la acusada no había mentido, de nada sirvieron ya que el juez cuestionaba su derecho a informar y la señaló por utilizar sus redes sociales, para desinformar o decir mentiras con respecto a la posición de lucha en contra del coronavirus que había asumido el gobierno de Xi Jimping.
Al comenzar el proceso jurídico, ya todo el mundo sabía que esta periodista seria condenada y aunque la fiscalía china solicito una condena de 5 años, el juzgado decidió otorgarle solo 4 años de trabajo forzado, en una cárcel a las afueras de Pekín.
Régimen de censura
El gobierno chino ha tratado por todos los medios, ocultar el verdadero origen del Covid-19 y no ha podido explicar al resto del planeta, como logro aislar la enfermedad en la provincia de Wuhan, sin que esta llegase a Beijing, Shanghai o cualquiera de los principales centros industriales del país.
Es conocido que los regímenes dictatoriales como el que existe en China, se valen de un estricto métodos de censura, para evitar que se sepa la verdad de lo que ocurre.
Al parecer lo que encolerizó al gobierno, fue un video colocado por la periodista en YouTube, en donde se veían hasta 3 pacientes en una cama y personas sentadas en el piso conectadas a tanques de oxígeno.
Tambien se aprecia en el video, una fila de cadáveres que se encontraban esperando para ser cremados. Esto aún cuando el gobierno, a través de sus medios de difusión, habían dicho que las muertes eran mínimas y que por esta razón no era necesario alarmarse, ya que la enfermedad estaba totalmente controlada.
Por supuesto la actitud asumida por Zhang, echaba por tierra cualquier plan del gobierno chino de cambiar la verdad. Es por ello que en el juicio, se hizo énfasis que la periodista edito los videos antes de colgarlos en la red social, todo con la intención de desprestigiar la labor del Partido Comunista en pro de su pueblo.
Libertad de prensa en un país con censura
Para los periodistas del mundo, el hecho que uno de sus colegas haya sido apresado tan solo por decir la verdad, contradice el derecho universal de la libertad de expresión o de prensa. En este caso ha quedado demostrado una vez más, que decir la verdad en China equivale a un arresto o prisión.
Los ciudadanos Chen Qiushi, Li Zehua y Fang Bin, periodistas de profesión, fueron igualmente apresados, al culpárseles de haber sido cómplices del delito de provocación de disturbio. De igual forma se les señala como encubridores, puesto que ninguno de ellos participo a PCCh de las informaciones falsas que Zhang Zhan difundiría por internet.
Esta acción de apresar a los periodistas cumple una doble función, primero generar temor en la población general ya que demuestra, que todo aquel que haga pública una noticia que pueda perjudicar la imagen del gobierno será castigado.
Por otro lado el régimen evita que pueda informarse de los que realmente ocurrió en Wuhan, así como del origen del Covid-19.
Futuro de Zhang Zhan
Zhang se declaró inocente durante el desarrollo del juicio y manifestó en varias ocasiones, que estaba consciente que sería condenada y que por esa razón, había decidido iniciar una huelga de hambre.
Esta acción no tuvo éxito ya que la periodista fue obligada a alimentarse mediante un tubo nasal que se le colocó. Además, se le amarraron las manos a una cadena, para evitar que se sacara dicho tubo.
Al parecer ese tipo de alimentación le ha causado serios problemas de salud y, en la actualidad, tiene fuertes dolores estomacales así como constantes dolores de cabeza.
Sus abogados han expresado que Zhang Zhan debería ser remitida a un centro asistencial y no a una cárcel. Ante esta solicitud, voceros del PCCh dijeron que la periodista intento romper el orden de gobierno y que por ello deberá ser castigada, lo que hace ver que la injusticia sigue siendo la ganadora en China.