Volver a insistir en que la nota de prensa debe llevar información, estar alejada del lenguaje publicitario o promocional y que debe ser del interés de los medios y públicos es hacerse demasiado repetitivo. Pero nunca está de más volver a refrescar la memoria porque, desde muchos departamentos de comunicación o desde algunas empresas, parece que si no suena a cuña publicitaria, no lo consideran nota al uso. Y nada más lejos de la realidad.
Por ello, queremos apostar por finalizar el año apoyando una teoría: en 2018 triunfarán las notas de prensa originales, como lo harán en adelante.
Y por originales no queremos decir que haya que añadirles globos, confeti o sorpresa, sino que busquen, desde el formato mismo, llamar la atención aportando algo distinto a lo de siempre.
¿Por qué? Por los flujos de información continua que hoy en día llegan a las redacciones y a las nuevas plataformas estrella de la comunicación e información para muchos: las redes sociales. Ser capaz de atraer miradas en este contexto, sin ser original o saber cómo adaptar el lenguaje y mensaje, será imposible.
Parece confuso, pero no lo es tanto. Basta con echar un vistazo a la Bandeja de Entrada de las redacciones, cada vez hay más comunicaciones que llegan desde agencias, empresas y particulares y que buscan darse a conocer en los medios. Porque ya es vox populi que las publicaciones orgánicas son aliadas perfectas de estrategias de seo que hacen posicionar, con las nuevas fórmulas de buscadores e incluso de redes, marcas a la cabeza.
Sin embargo, lo más habitual cuando recibimos una nota es que siempre siguen un formato más que establecido y pocas arriesgan o dejan arriesgar en su tratamiento.
Claves para mejorar la nota de prensa con tan solo una mirada
- Concisión: basta de notas de prensa eternas que no aportan nada. Depura la información y busca ese enfoque que lo haga distinto a lo que ya se ha publicado previamente. Piensa como periodista por un momento, ¿qué haría que te pararas a leer una nota de prensa? Eso es lo que tienes que pensar, reflexionar y ejecutar. Aunque desde las compañías se busca enumerar bondades e innovaciones, no sirve de nada si no se consigue leer, entender o convencer. Céntrate en dos ideas principales y desarrollalas lo justo desde un punto de vista original. Nada de datos y punto. Los datos son imprescindibles, pero dales vida, contexto, importancia cuando la tienen. Sin eso es una nota más, aburrida. Busca el dato más curioso y elabora a través de ese dato el contenido. Lleva al que será el lector a tu contexto, haz que quiera conocer más, saber por qué sucede y cómo es posible. Haz que se interese. Solo así de lector pasará a interesado y, de ahí a cliente, es solo cuestión de tiempo.
- Orientación social media: ¿parece absurdo? Pues no lo es. Cada vez los lectores están más acostumbrados a leer las noticias que aparecen en sus cuentas de redes sociales, en sus timelines o a través de vídeos o imágenes que les llaman la atención. Es tal la cantidad de información cada vez que abren una plataforma, que si no se resalta, no se lee siquiera. Mientras que antes acudían a las principales cabeceras, ahora muchas veces tienden a darle clic a esas publicaciones que aparcen en sus muros o en los de sus conocidos y cuyos titulares o imágenes les han hecho frenar. ¿Te has fijado qué clase de titulares e información ofrecen? Casi telegráfico, llamativo, curioso y atractivo. Algo que llama mucho la atención y que se desarrolla lo necesario, sin más. Es información rápida, porque quien quiera informarse a fondo, lo hará. Solo faltaba encender la mecha de la curiosidad.
- Consigue visibilidad: gracias a noticias interesantes. Olvídate de pensar en milagros y ponte en el otro lado. Imagina que recibes cientos de correos cada día con información. ¿Cuál sería el que leerías? Pues eso debes pensar. Puede que creas que tu noticia es lo más, pero si no la revistes bien, si no la consigues «vender» gracias a un contenido que de verdad aporte algo a quien lo lee y desde una perspectiva única, desde luego vas a pasar desapercibido. Si te fijas, las noticias que más recuerdas son las que más te han chocado o llamado tu atención. El periodista que recibe toda esa cantidad de información quiere algo distinto, algo que le permita trabajar y lucirse, no algo tedioso que interpretar. Aliarte con él sin acuerdos y ofrecerle datos y piezas que le sirvan de base para que luego pueda llevarlo a su terreno será vital para pasar sus filtros.
- Déjate asesorar: aunque pienses que tienes la clave, nada como dejarte asesorar y pensar de nuevo en social media. Si eres capaz de hablar al gran público conseguirás los objetivos. Sal del discurso corporativo. Atrévete con lo transgresor y deja que los profesionales de la comunicación de tu empresa o agencia te orienten de cómo atraer al lector digital. ¿Cómo interactúas en redes? ¿Conoces los algoritmos y las opciones de publicidad que pueden ponerte en el muro de las personas que se interesan por tus productos o servicios? ¿Conoces de verdad el lenguaje de redes y la forma de optimizar las imágenes y el contenido multimedia? Por suerte, cada vez hay más perfiles en las agencias capaces de transformar el mensaje y hacer que llegue a su público objetivo. Campañas concretas, incluso con microinfluencers, pueden ser un paso de gigante si están bien dirigidas.
- Piensa global: es vital para de verdad comunicar. Vivimos en la era digital. Basta de pensar en el pasado, en lo que funcionaba. Es hora de pensar en el futuro, en cómo quieres que te reconozcan, en cómo quieres conocer la demanda y ofrecer los servicios. Piensa que cada vez llegas a más gente a través de una pantalla y que lo que mueve a alguien que vive en el norte, probablemente no sea igual que lo que mueve a alguien que vive en el sur. Vender paraguas en un escenario u otro, por ejemplo, requiere adaptarse a lo que buscan y, sobre todo, acertar en el momento.